Con lo que les gusta a las hermanas Hilton hacerse notar allá por donde van, este fin de semana han tenido un auténtico filón para destacar. Se ha casado Nicky y, como era de esperar, la boda ha sido de todo menos discreta.

La mayor de las hermanas Hilton ha contraído matrimonio con uno de los herederos de la dinastía Rothschild y ambas familias han hecho un amplio despliegue para que la boda sea como la de los cuentos de hadas (con palacio incluido, ya que la celebración tuvo lugar en los jardines del palacio de Kensington, la residencia londinense de los Duques de Cambridge). Con un diseño de la Maison de Valentino que los medios británicos estiman que ha rondado los 70.000 euros, Nicky Hilton se presentó ante los casi 300 invitados como una novia clásica, con un vestido de encaje de cuello de cisne y manga larga y con falda amplia en la que sobresalían tres grandes pliegues a la altura de la cadera. El diseño recordaba mucho al que lució hace años la princesa Marie Chantal de Grecia, también elaborado por Valentino. Entre las curiosidades del enlace, los zapatos de la novia, bordados con la fecha de la celebración y su nombre de casada: "Mrs Rothschild".

Aunque la discreción no es el fuerte de la hermana de la novia, en esta ocasión Paris Hilton pasó muy desapercibida, ya que formaba parte del cortejo de damas de honor y, como tal, lucía el mismo modelo que las demás chicas: vestido celeste de gasa con cuerpo drapeado y un delgado cinturón de pedrería.