Pablo Alborán, cantante

"Me han roto el corazón una vez pero ha dado para muchas canciones"

  • Agradecido, simpático y con los pies en la tierra, el joven malagueño no encuentra las palabras para definir lo que ha vivido en los últimos doce meses.

Pablo Alborán ha conseguido con 22 años lo que muchos no logran en toda su trayectoria. Él, consciente de la oportunidad que le ha dado la vida, procura no levantar los pies de la tierra y sólo quiere seguir trabajando. Para enamorar nada más que le hace falta una guitarra, que acompañada de su voz han conquistado miles de corazones, y no sólo de España. Alborán es todo un ídolo en países como Portugal, Argentina o México, entre otros tantos. Desde muy joven supo que quería ser un gran músico. Pasó horas estudiando guitarra, piano y canto. Con tan sólo 12 años compuso sus primeras canciones, las que ahora cantan al unísono su legión de fans, que no tiene edad ni fronteras. Las redes sociales y el Youtube han sido las plataformas que a lo largo de su corta pero intensa carrera le han servido de promoción. Éstas lo hicieron famoso incluso antes de tener un disco en el mercado. En la actualidad, tras un año en el que su vida ha dado un giro radical, empieza a recoger los frutos de un trabajo bien hecho. Un malagueño optimista, que mira al futuro con ganas y que ha cumplido un sueño. Su sueño.

-Un año. Doce meses en los que ha cambiado su vida de forma radical. ¿Cómo lo ha hecho?

-No lo sé. Es alucinante. En el último año, mi vida ha dado un giro radical, han pasado muchas cosas que jamás hubiera imaginado. Muchas sorpresas entre las que destaco el cariño de la gente, que para mí ha sido algo inesperado. Hemos trabajado mucho, nos hemos dejado llevar cuando ha sido necesario y también he tenido suerte.

-Se habrá visto en situaciones que jamás imaginó...

-Piensa que yo estaba acostumbrado a cantar para mi madre, mi familia y mis amigos. Luego pasó lo de Youtube y todo lo que ha venido después. He cumplido mi sueño, pero toca seguir trabajando. No queda otra.

-Cuando el éxito es fulgurante y uno sube tan rápido. Da vértigo, ¿verdad?

-No lo pienso, porque no me da tiempo, pero cuando hago balance sí que da un poco de miedo. Va todo tan rápido y hay tanto trabajo por hacer que, aunque he cumplido mi objetivo, la meta aún está lejos. Hay que seguir soñando.

-De momento, ya ha cruzado el charco...

-Impresionante. De verdad que no puedo describir con palabras lo bien que se han portado conmigo, la gente se ha volcado y me ha dado un cariño gratuito que nunca podré recompensar. Lo intento con mi música, que es la mejor forma de llegar a todos ellos. Llegar a un país donde nadie te conoce y partir de cero con la compañía de mi guitarra es genial.

-¿Cuántas veces le han dicho 'te quiero' en este año?

-No sé decirte, pero sí sé las veces que se lo he dicho yo a mi gente, y han sido muchas. Compartir historias y vivencias con tu público a través de la música es lo mejor de todo lo que he vivido.

-Anécdotas tendrá para escribir un libro, supongo.

-¡Muchas! Me han pasado cosas surrealistas como estar en un avión y que las azafatas me levanten discretamente de mi asiento y me dijeran que les acompañara. Entonces, me llevaron hasta la cola del avión donde me esperaba toda la tripulación para hacerse una foto conmigo. Con el miedo que me da volar pasé un mal rato...

-¿Qué es lo más raro que le han tirado al escenario?

-De todo, pero me da vergüenza contarlo... (ríe).

-Se ha hecho famoso por cantar y escribir al amor. ¿Le apetece enamorarse?

-Tengo ganas, pero no tiempo. Ahora estoy viviendo cosas muy bonitas y no puedo dedicarle mucho tiempo al amor. Aún así, claro que me enamoraré. Me tienen que hacer daño para que salgan discos.

-¿Le han roto el corazón muchas veces?

-Me rompieron el corazón sólo una vez pero ha dado para muchas canciones, así que de momento...

-Opciones de ligar tendrá un millón. Antes de ser famoso, ¿también tenía éxito con las chicas?

-Lo normal, ¡supongo!

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios