El decano del Colegio de Abogados de Málaga, Francisco Javier Lara, junto a miembros de la junta de gobierno y del equipo de turno de oficio, que coordina la asistencia a personas extranjeras que llegan a las costas en pateras, trasladaron al defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, la problemática en la asistencia a estas personas. Más de 300 abogados malagueños integran este turno y reciben formación de manera obligatoria y periódica para ofrecer un servicio de máxima calidad.

Uno de los problemas es el de la representación de cara al recurso contencioso-administrativo. En ocasiones se está negando la designación de un procurador, de modo que cuando los extranjeros no se presentan para firmar en los juzgados, los procedimientos se archivan. También se puso sobre la mesa la necesidad de mejorar la coordinación con las ONG, ya que los letrados necesitan saber dónde se encuentra el migrante a la hora de recurrir una orden de devolución cuando ha solicitado protección internacional para verificar si llegó a formalizarla. En tercer lugar, el Colegio puso de manifiesto la necesidad de contar con más traductores para asistir a los migrantes en comisaría. El tiempo para la entrevista individual es limitado y la asistencia se ralentiza mucho en llegadas superiores a cien personas. En este punto, apoyaron que los abogados se puedan entrevistar con estas personas en los espacios a los que son trasladados.