La pista irlandesa del caso Amy está siendo tomada en cuenta por los agentes que investigan la desaparición de la menor de 15 años. Las informaciones que la situaban en la zona de Wexford se están comprobando con celeridad porque la joven tiene familia en este lugar.

Según fuentes cercanas al caso, el hecho de que en esta zona residan familiares de Amy, unido a la creencia de que ésta se ha podido fugar de forma voluntaria, lleva a que se revisen concienzudamente las llamadas de personas que la sitúan en este punto. Hay que tener en cuenta que la menor tenía previsto regresar a su país natal y que su adaptación a la Costa del Sol no había sido óptima.

La Policía irlandesa (Garda) informó recientemente de que investiga la posibilidad de que Amy pueda estar ya en Irlanda.

Un portavoz oficial señaló que habían recibido llamadas de testigos que aseguran haber visto a la joven, de 15 años, en Wexford, al sureste de la isla, una localidad próxima a los dos puertos de entrada de barcos de pasajeros desde el continente más importantes de Irlanda.

La fuente precisó que, aunque la Garda está investigando esas informaciones, ningún agente asignado al caso ha podido, de momento, confirmar su veracidad.

"Se están invirtiendo muchos recursos para aclarar la desaparición de Amy. Estamos en contacto con las fuerzas del orden españolas y con la Interpol, por lo que, en cuanto sepamos algo, se notificará rápidamente", añadió el portavoz de la Garda.

Mientras tanto, la Guardia Civil busca el coche de un amigo de la adolescente por si ella lo cogió para irse, vehículo ilocalizable desde hace días, al que la chica tenía acceso fácil y cuya situación no había sido denunciada.