Nueve meses, 15 eventos, fiestas y conciertos, edad media de los asistentes, 18 años y un 55% de ellos varones. Con esta muestra ha trabajado la Asociación Cívica para la Prevención en el Servicio de Atención a la Movida (SAM) este año y como resultado su estudio desvela un "alarmante aumento en el consumo de alcohol" entre los jóvenes que disfrutan de este tipo de ocio nocturno. También ha subido el consumo de tabaco, cannabis, excitantes de bebidas energéticas y éxtasis. Salvo la cocaína, que ha experimentado un ligero descenso, el resto de sustancias estupefacientes crece en el año 2014.

"Se trata de un público muy específico, no se puede generalizar a toda la sociedad, pero los datos lamentablemente coinciden mucho con los de otras encuestas", explica Antonio Cañada, coordinador del Servicio de Atención a la Movida. "El nivel es altísimo, cada vez empiezan antes a consumir y vemos que el espacio lúdico nocturno está indiscutiblemente unido al consumo", agrega Cañada. El informe de este servicio subvencionado por la Junta de Andalucía asegura que casi el 92% de los jóvenes en ferias y fiestas beben alcohol. Frente a las cifras de 2013, el 81,3%, supone que se incrementa en más de diez puntos este año. "Nos ha sorprendido este aumento tan grande", señala el coordinador del Servicio de Atención a la Movida.

También sube, aunque de manera mucho más sutil, el consumo de tabaco, que sobrepasa el 40% en este colectivo, y el cannabis, al que recurre algo más del 30% en sus noches de diversión. La crecida más fuerte se produce en las xantinas, que son estimulantes menores como la cafeína y la teína que se encuentran en las bebidas energéticas.

Su consumo entre los jóvenes se ha duplicado pasando del casi el 30% al 60%. "Entre los falsos mitos que existe está el de que si te tomas este tipo de bebidas no da positivo en el control de alcoholemia, nosotros estamos ahí también para desmontar estas creencias", dice Antonio Cañada.

También el éxtasis, siendo poco representativo porque supone que lo consuma poco más del 10% de los participantes en la muestra, ha crecido de forma significativa y se ha puesto por delante del consumo de cocaína. Desde febrero hasta octubre, el SAM acudió a eventos por toda Andalucía. "En ellos montamos un punto de información y llevamos tres líneas de acción: alcohol y conducción, reducción de riesgo y daño en el consumo de sustancia y prevención de relaciones sexuales de riesgo", comenta Antonio Cañada, que añade la información que ofrecen a los hosteleros que instalan las barras en este tipo de conciertos y ferias.

Además del punto fijo, montan rutas por el lugar para recoger información sobre el perfil del evento, los asistentes, la edad, si hay policía y servicios de emergencia, "valorar todo y ver el tipo de consumo que existe, tanto a niveles de observación como gracias a los cuestionarios que realizamos entre los jóvenes", apunta el coordinador.