La Torre Vigía de Torremuelle, en Benalmádena, declarada Bien de Interés Cultural (BIC), y sus aledaños han sido objeto de pintadas y grafitis recientemente.

Tras conocer los hechos, la Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Benalmádena, y al tratarse de un BIC, por ser una torre de vigilancia construida tras la conquista cristiana en el siglo XVI, se ha procedido a su inspección técnica para la valoración de los daños, para su denuncia a las autoridades pertinentes en patrimonio histórico, es decir, el Seprona de la Guardia Civil y la Junta de Andalucía.

El teniente alcalde y concejal de Cultura, Enrique Pablo Centella, ha destacado que "atentar contra el patrimonio histórico es un delito, y claramente una falta de respeto hacia la rica historia del municipio".

Así, ha indicado que se realizarán los trámites necesarios pertinentes para poder retirar dichas pintadas en el menor tiempo posible, "pero siguiendo las indicaciones y procedimientos que se contemplan en la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía".