Málaga

El Ayuntamiento niega a los colegios cambios que sí hizo para las bandas

  • Las ordenanzas de ruido se modificaron en 2011 para permitir dispensas acústicas a estos grupos de música durante la cuaresma

Foto de familia de jugadores del club Jardines de Puerta Oscura.

Foto de familia de jugadores del club Jardines de Puerta Oscura. / ANDRÉS ESCALONA / CLUB PUERTA OSCURA

El Ayuntamiento de Málaga cambió en marzo de 2011 las ordenanzas contra el ruido para dar amparo legal a los ensayos de las bandas de cornetas y tambores que acompañan las procesiones de Semana Santa. Aquella decisión se adoptó para solucionar un conflicto similar al que embarga ahora a los colegios expedientados por el área municipal de Medio Ambiente por infracción muy grave de los límites acústicos a consecuencia de las actividades que realizan otros tantos clubes deportivos en las instalaciones escolares fuera del horario lectivo.

El Pleno municipal modificó entonces el artículo 41 de la Ordenanza para la Prevención del Control de Ruidos y Vibraciones, de modo que facultaba a la Junta de Gobierno Local a autorizar dispensas acústicas. Desde entonces el Ayuntamiento tiene capacidad para autorizar actividades que exceden los límites antirruido "cuando se organicen actos en la vía pública con proyección de carácter oficial, cultural, religioso o de naturaleza análoga". La nueva redacción del artículo 41 establecía que en relación con los ensayos de las bandas de música de Semana Santa "se podrá autorizar la dispensa en las vías o sectores afectados y durante la realización de aquellas, de los objetivos de calidad acústica señalados en esta Ordenanza con una limitación horaria entre las 20:00 y 22:00 horas". En resumen, las bandas de cornetas y tambores pueden ensayar en la calle hasta las 10 de la noche en cuaresma.

Tal y como sucede ahora con la colisión de los derechos de los niños y jóvenes a realizar actividades deportivas y de los vecinos a su descanso, la polémica entonces también alcanzó magnitudes colosales. Las bandas -específicamente las de cornetas y tambores- amenazaron con no participar en las procesiones de Semana Santa porque, de lo contrario se enfrentaban a denuncias y sanciones. El Ayuntamiento con anterioridad había autorizado los ensayos de las bandas en espacios públicos, pero los vecinos acudieron a los tribunales y una sentencia dio al traste con esa fórmula, de ahí que decidiera cambiar las normas.

Daniel Zumaquero, presidente de la Agrupación de Bandas, reconoce las similitudes que guarda el conflicto por el ruido de las actividades deportivas con el que hubo con las bandas. También puntualiza que aquella solución no fue ni fácil ni rápida. Ante aquel desafío las bandas se organizaron en una agrupación cultural con entidad jurídica, se movilizaron y se procuraron el apoyo de todos los grupos municipales.

La Delegación de Educación ha propuesto una solución de estas características al pedir al Ayuntamiento una dispensa acústica que permita a los clubes deportivos mantener su programa de actividades, que se desarrolla de septiembre a junio, en ocho colegios públicos de Málaga. Por el momento, el concejal de Medio Ambiente de Málaga, Raúl Jiménez, ha negado esta opción al precisar que las dispensas que relajan las normas acústicas se otorgan para actividades excepcionales, circunstancia que no es aplicable a una temporada deportiva.

El Ayuntamiento, por el contrario, plantea a Educación que insonorice las instalaciones deportivas, opción que la Delegación no acepta esa solución porque, argumenta, son actividades ajenas a su competencia.

Las denuncias interpuestas por tres vecinos han dado lugar a que el área municipal de Medio Ambiente haya propuesto sanciones de 12.000 euros a los colegios públicos Lex Flavia y Revello de Toro por infracciones muy graves de las normas antirruido y a que haya abierto expediente sancionador por el mismo motivo al instituto Jardines de Puerta Oscura.

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