El Sindicato Provincial de Comisiones Obreras interpuso ayer 44 denuncias ante la Inspección de Trabajo por incumplimiento del convenio provincial de hostelería, subcontratando servicios ilegalmente. Las irregularidades que anuncia CCOO afectarían a 550 camareras de piso en la provincia que se encuentran trabajando con empresas externas a los hoteles.

La secretaria general del sindicato de servicios de CCOO Málaga, Lola Villalba, junto a varias de las kellys -como se hacen llamar el colectivo de camareras de piso, por "las que limpian"- presentó las denuncias en la jornada de ayer. Las limpiadoras de piso manifiestan las condiciones en las que trabajan sus compañeras externalizadas son "indignas". Málaga capital encabeza la lista de municipios con más establecimientos denunciados, con 17, seguida con Fuengirola con cinco.

Villalba afirmó que "esta práctica que además genera competencia desleal entre los propios establecimientos, ha producido una situación de explotación laboral y una grave discriminación y perjuicio económico y social a las trabajadoras", haciendo hincapié en la diferencia salarial y de condiciones entre unas kellys y otras.

La dirigente sindical afirmó que "la reducción salarial está derivando el coste salarial a beneficio empresarial, ahorrando cerca de cinco millones y medio de euros anuales", algo que según Villalba se convierte en "competencia desleal entre establecimientos" manteniendo a las trabajadoras en "semiesclavitud".

Pepi García, camarera de piso en el hotel Timor Sol en Torremolinos desde hace 38 años, denunció la situación de las kellys en general y de sus compañeras externalizadas en general. García aseguró que existe una diferencia salarial del 50% entre las trabajadoras dependientes del hotel y las externalizadas, incidiendo además en la carga de trabajo de este gremio. "Trabajamos el doble. El ritmo de trabajo es brutal. Es una situación que no se puede aguantar y que supone a las camareras de piso enfermedades porque no es posible hacer el volumen de trabajo que se exige", declaró García.

La situación de las camareras de piso que trabajan externalizadas es un tema que se lleva defendiendo desde hace años y por el que las kellys se han manifestado y concentrado en múltiples ocasiones, aunque esta es la primera vez que se presenta una denuncia ante la Inspección de Trabajo. Este movimiento se debe, según fuentes de CCOO, a que "existe una sentencia contra un hotel de Málaga capital en la que se les obliga a cumplir el convenio a pesar de ser una trabajadora de una empresa externa". El hotel recurrió la decisión del juzgado, por lo que no se trata de un dictamen en firme. Sin embargo desde el sindicato defienden que la sentencia les permite "solicitar una inspección de trabajo y que actúen".