La Policía Local de Málaga ha detenido a un individuo, natural y vecino de Málaga de 27 años, que, al parecer, conducía de forma temeraria, bajo la influencia de bebidas alcohólicas, sin carné al haber perdido todos los puntos, y que, además, se saltó un control de seguridad obligando a un agente a saltar para no ser atropellado.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 12:30 del 28 de junio, cuando un grupo de policías locales pertenecientes al Grupo Operativo de Apoyo (GOA), incluida una Unidad Canina, se encontraban realizando un control de seguridad y documentación de vehículos en la avenida de Europa.

Así, uno de los agentes efectuó señales de alto a un vehículo turismo, cuyo conductor, al aproximarse al lugar donde se hallaba el policía, aminoró la marcha, para, de forma repentina y cuando se encontraba a poca distancia, acelerar obligando al agente a saltar hacía un lado de la vía para evitar ser arrollado, según han informado desde la Policía Local en un comunicado.

Posteriormente, se inició una persecución por la avenida de Europa, en dirección hacia el Polígono Santa Bárbara, circulando el vehículo fugado a gran velocidad y sorteando a otros que transitaban por la calzada, estando a punto de colisionar con los mismos en varias ocasiones.

En la huida, el conductor rebasó en fase roja un semáforo, obligando a otro conductor a detenerse para evitar una colisión, además de que una pareja de ancianos que cruzaban por un paso de peatones tuvieron que apartarse para no ser atropellados.

El individuo continuó circulando a excesiva velocidad, adentrándose en calle Cortijo Echarte y por calle Canchal y realizando continuos volantazos y maniobras en zigzag para intentar no perder el control del vehículo. 

Finalmente, el conductor se vio obligado a detener la marcha al verse bloqueado por un vehículo que salía de un estacionamiento, a pesar de lo cual continuaba acelerando, con la intención, presuntamente, de marcharse una vez que ya no estuviera el vehículo que lo obstaculizaba, han precisado.

Tras ello, uno de los policías locales que lo seguían se bajó del vehículo para intentar hacerse con las llaves del coche fugado para impedir que se fuera.

El agente se introdujo por la ventanilla delantera izquierda del vehículo, momento en el cual su conductor comenzó a propinarle golpes en el pecho, por lo que tuvo que ser reducido e inmovilizado. Acto seguido, el agente sacó al individuo del interior del coche y, aunque ofrecía gran resistencia, fue inmovilizado y detenido.

Además de los delitos de conducir con temeridad manifiesta y atentado a agentes de la autoridad, los policías locales pudieron apreciar que el conductor presentaba síntomas inequívocos de encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas, además de que carecía de permiso de conducir por pérdida total de los puntos asignados, han señalado.

El ahora detenido fue trasladado a dependencias del Grupo de Investigación de Accidentes y Atestados (GIAA) de la Policía Local de Málaga, donde se le efectuó la correspondiente prueba de alcoholemia por el procedimiento de aire espirado, dando un resultado positivo de 0,84 y 0,80 miligramos por litro en primera y segunda prueba respectivamente.

Finalmente, el individuo sería puesto a disposición judicial. El vehículo que conducía quedó inmovilizado en los depósitos municipales, a disposición de su propiedad, una vez desaparecidos los motivos de su inmovilización.