La reconversión en hotel de lujo del emblemático Palacio de Miramar se prolongará más de lo previsto inicialmente. La apertura de este nuevo establecimiento hotelero, impulsado por la empresa Grupo Santos, no será realidad, previsiblemente, antes de finales de 2013, un año después de la última fecha anunciada por la firma privada. Así lo confirmaron a este periódico fuentes próximas al proyecto, que precisaron que conforme al calendario que en este momento se está manejando, la obra de recuperación del inmueble no podrá iniciarse hasta finales de 2011, momento a partir del cual habrá que contar como poco unos 24 meses.

Pero antes de que las máquinas empiecen a trabajar en la zona, que en este momento presenta una imagen de dejadez en el recinto exterior al edificio, los responsables de la iniciativa deberá solventar un largo y prolijo proceso administrativo. En este sentido, las fuentes consultadas comentaron que la idea es que el proyecto básico de la intervención sea una realidad a finales de este ejercicio, con lo que se destinará buena parte de 2011 a dar cumplimiento a los requisitos administrativos, incluyendo la petición y concesión de la licencia de obras.

Estas previsiones varían sustancialmente las expuestas en mayo del pasado año por el consejero delegado de Grupo Santos, José Luis Santos, quien en aquel momento auguró que la apertura de las puertas del Miramar como nuevo hotel sería factible en verano de 2012. Sin embargo, los hechos muestran una situación diferente y ralentizada. Cabe destacar que en aquel momento, el responsable de la firma que adquirió en subasta este bien, que pertenecía a la Junta de Andalucía, apuntó que el inicio de los trabajos podría tener lugar a mediados de 2010.

No será hasta que esté completamente detallado el proyecto básico cuando se podrá precisar el número de habitaciones que tendrá el remozado hotel de cinco estrellas gran lujo. Aunque se apunta a que rondará las 200 habitaciones, todas ellas localizadas en las plantas superiores, mientras que el nivel inferior estará dedicado a la organización de eventos. Uno de los objetivos que se marca la empresa es la de recuperar los tres grandes salones de los que disponía en sus inicios el edificio, que albergó durante años el hotel Príncipe de Asturias. A ello se suma la idea de recuperar la piscina que en sus orígenes había en la parte trasera de la construcción, a lo que habrá que sumar varias plantas de aparcamiento y la opción de conectar la zona hotelera con la playa de La Malagueta mediante un túnel peatonal que pasaría bajo el Pase Marítimo Pablo Ruiz Picasso.

En este escenario, el proyecto de reconversión del Palacio Miramar en hotel de lujo se va, casi, a eternizar. Más aún si se tiene en cuenta que la venta en subasta del inmueble tuvo lugar en mayo de 2008. Es decir, que probablemente pasarán casi seis años desde la enajenación del mismo y su inauguración.

La adquisición por parte de Grupo Santos se produjo por una cuantía de 21,5 millones, a los que, según su consejero delegado, habrá que sumar otros 40 millones de euros que se destinarán a los trabajos propios de recuperación de este edificio. ejecutado entre los años 1921 y 1926 y obra del arquitecto Guerrero Strachan.