Respeto a la libertad de prescripción de los facultativos. Es decir, que puedan recetar el fármaco que estimen conveniente sin ninguna cortapisa. Es lo que reclamaron ayer expertos del mundo sanitario del Colegio de Médicos (COM), el Departamento de Farmacoeconomía de la Universidad de Málaga y de la patronal Farmaindustria. Fue el posicionamiento adoptado tras una mesa de trabajo organizada por el COM y que, aunque sin citarla, supone una crítica a la subasta de medicamentos puesta en marcha por la Consejería de Salud que solo permite a los facultativos recetar el fármaco licitado y a la vez que también obliga a los farmacéuticos a dispensar esa única medicina.

En un comunicado conjunto, el Colegio, Farmaindustria y el Departamento de la UMA advierten que en pacientes de Muface, Mugeju e Isfas se han comenzado a detectar limitaciones a la libre prescripción. Según los datos facilitados por el COM, el gasto farmacéutico por recetas se sitúa por debajo de los índices de la media europea y ha experimentado una reducción del 27% en los últimos cuatro años, "situándose en niveles similares a 2003".

Los participantes en la jornada organizada por el Colegio apuntaron que la política de control del gasto farmacéutico "no se puede centran en medidas exclusivamente economicistas, olvidando los resultados en salud, pues a la larga será contraproducente".

"La Administración ha centrado la mayoría de sus medidas en relación al gasto farmacéutico en limitar el derecho a la libertad de prescripción", apuntó Nuria García-Agua, de la cátedra de Economía de la Salud de la UMA. Por eso, los participantes en el encuentro insistieron en pedir "respeto" para el criterio médico a la hora de recetar.