La Fiscalía de Málaga ha solicitado una pena de 22 años de prisión para un hombre, al que acusa de acabar con la vida de otro, que se encontraba sentado en un banco de una céntrica plaza de Torremolinos y con el que tenía enemistad desde hacía tiempo a raíz de una operación de venta de un apartamento en el año 2005.

Los hechos sucedieron en septiembre de 2011. Según las conclusiones provisionales del fiscal, a las que ha tenido acceso Europa Press, el acusado, de 79 años entonces y con antecedentes penales por un intento de asesinato, se acercó por detrás a la víctima; y, "de forma sorpresiva y desde una distancia inferior a un metro, le disparó". El procesado utilizó un arma de fuego de proyectil múltiple, es decir, postas, que le causó a la víctima una herida que le produjo la muerte en el acto, sostiene la acusación, que precisa que realizó el disparo con una escopeta modificada de dos cañones, calificada como arma prohibida en el actual reglamento de armas. Además, el acusado, se apunta, carecía de licencia para tener y utilizar armas.

La enemistad entre el agresor y la víctima, según se pone de manifiesto en el escrito inicial del ministerio fiscal, tenía su origen en que en el año 2005, el fallecido vendió un apartamento de su propiedad y el acusado hizo de intermediario, "exigiendo al finalizar la operación el pago de la cantidad de 6.000 euros, cosa a la que aquel se negó".

La Fiscalía acusa al hombre por un delito de asesinato, con la agravante de reincidencia, ya que el procesado había sido condenado por un delito de asesinato en grado de tentativa con sentencia firme de 2008; y por otro de tenencia ilícita de armas. Por el primer delito, el fiscal pide una pena de 20 años de prisión y por el segundo solicita que se le impongan dos años de cárcel. El juicio se celebrará con jurado a partir del 13 de mayo.