Francisco de la Torre, alcalde de Málaga

"Gobernaré para todos, sin dogmas ni trincheras"

  • Otorga prioridad al impulso del Auditorio, el plan Guadalmedina y el soterramiento del Paseo de los Curas y Cánovas del Castillo

Comparecencia de De la Torre durante el Pleno.

Comparecencia de De la Torre durante el Pleno. / Marilú Báez

Francisco de la Torre quiere que Málaga mire al futuro con ambición. En el que ha sido su sexto discurso tras ser investido alcalde de la ciudad, después de asumir la vara de mando a principios del año 2000, De la Torre ha abogado por no limitar la ambición del nuevo equipo de gobierno "porque a Málaga le queda recorrido y potencial; porque nuestro trabajo es llegar tan lejos como queremos soñar". "Si hemos conseguido cosas que hace unos años solo soñábamos, seremos capaces de hacer realidad lo que soñamos ahora", ha afirmado en la parte final de su intervención en el Pleno de constitución de la nueva Corporación municipal.

Ya como alcalde recién investido, ha insistido en su compromiso de ser "el alcalde de todos, de gobernar para todos, sin más guía que el bien común y el interés general", y ello "sin dogmas ni trincheras, por encima de intereses partidarios, cerca de la gente y para la gente".

En su discurso ha sacado pecho de los resultados electorales obtenidos el pasado 26 de mayo, con 14 concejales, uno más que en el mandato pasado, recordando que el sentir de los nuevo canales de comunicación "no sustituye al voto", como queda demostrado en el comportamiento electoral.

Para ratificar el apoyo obtenido por su candidatura, ha puesto de manifiesto el evidente contraste entre lo sucedido en los comicios locales y los europeos, cuyo análisis permiten "advertir que ha existido un apoyo muy transversal hacia la lista que tuve el honor de encabezar". Aun sin decirlo, el alcalde ponía en valor el peso de su marca personal en la posición adoptada por los votantes.

A juicio, el respaldo recibido en la última cita electoral "supone un impulso para los cuatro años de mandato" que ahora se inician. Dijo asumir asume el "mandato" de dar continuidad al proyecto iniciado por el PP en 1995 y que asumió en primera persona en 2000. "Que Málaga no se detenga", ha dicho.

El regidor ha puesto en valor lo logrado en los últimos 16 años, al punto de que la ciudad se ha ganado "un puesto modélico dentro del mapa de las ciudades españolas e inclusive las europeas", siendo referencia en materia de equipamiento y actividades culturales. Asimismo, ha salido en defensa de la política como una actividad "necesaria, noble, trascendental", subrayando la obligación de las nueva Corporación de cambiar "la percepción deformada que a veces se tiene de ella". "Lejos de ser un problema, la política ha sido, es y será la solución", ha destacado.

En la línea de lo expresado por su ya nueva socia de gobierno, la portavoz de Ciudadanos en la Casona del Parque, Noelia Losada, De la Torre ha esbozado las principales líneas de acción del mandato, otorgando un papel relevante a la construcción del Auditorio en los suelos del puerto de Málaga, siguiendo el modelo del año 2007, que eleva la inversión necesaria a unos 100 millones de euros.

A este gran proyecto, convertido casi en una obsesión personal en los últimos años, ha sumado el avance en el plan especial del Guadalmedina, con la mejora de la conexión entre las dos márgenes y la construcción de puentes-plaza. Y ello sin obviar la que ha sido propuesta estrella de su campaña electoral, la mejora de la comunicación del eje litoral, sobre la base del soterramiento del Paseo de los Curas y Cánovas del Castillo y la construcción de un intercambiador modal en la Explanada de la Estación y de una nueva estación junto a la Plaza de la Marina.

Una operación de gran envergadura cuyo valor puede rondar los 250 millones de euros. De acuerdo con las previsiones del regidor, una parte de este coste podría sufragarse con la venta de los terrenos sobre los que ahora se levanta la estación central de autobuses, que se destinaría a un centro de negocios de iniciativa privada.

De la Torre, que en los últimos años de mandato insiste en la necesidad de impulsar acciones con las que rebajar el fracaso escolar, ha incidido en ello en su primer discurso tras ser investido en el cargo. "Hay que poner en marcha proyectos piloto que permitan reducir el abandono escolar y mejorar la calidad de toda la enseñanza y muy especialmente de la Formación Profesional", ha comentado, puntualizando que se trata de una labor a desarrollar en colaboración con la Junta de Andalucía.

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