Las alarmas vuelven a saltar en la barriada de Las Flores, que registra el tercer tiroteo en la última semana. La Policía Nacional trata de dilucidar si un rifirrafe ocurrido entre dos clanes dedicados, supuestamente, al negocio de la droga a pequeña y mediana escala es el origen del conflicto desatado en el barrio. Los investigadores tienen la certeza de que, durante este último episodio, ocurrido el jueves por la noche, se produjeron al menos tres detonaciones, aunque no hay constancia de que hubiera heridos. La hipótesis que se contempla es que se trata de disparos provocativos por parte de una de las familias enfrentadas.

Eran las 10 de la noche cuando los servicios de emergencia volvían a recibir el aviso de unos vecinos que aseguraban haber oído tiros. Agentes del Grupo Operativo de Apoyo (GOA) de la Policía Local de Málaga acudieron a Las Flores para comprobar lo ocurrido. A su llegada intervinieron cuatro tacos de cartuchos que se corresponderían con una escopeta. Los autores ya se habían marchado. “Se escucharon voces tras los disparos. La Policía ya ha llegado”, explicaba poco después uno de los residentes a este periódico.

El primero de los tiroteos ocurridos esta semana se registró el domingo y volvió a repetirse el lunes. Varias llamadas informaban al 112 de una pelea entre varias personas en calle Obispo Juan de Lancaster. La Policía Local decomisó un cuchillo de cocina de más de 15 centímetros, varios palos y un cartucho de escopeta detonado. Uno de los testigos que oyeron las detonaciones a plena luz del día recordaban entonces que hubo al menos “dos ráfagas de 8 o 9 disparos cada una”. Otro vecino advertía de la gravedad de que “uno pueda salir con una escopeta junto a otro que lleva un machete grande y un perro peligroso, a las 5 de la tarde, ponerse a pegar tiros y después irse a su casa”.