Agilizar la tramitación de los planes generales de todos los municipios de Andalucía. Ese es el objetivo que se ha marcado la Junta y para ello el gobierno autonómico está trabajando en un nuevo decreto que permita facilitar los trámites administrativos referidos al planeamiento local.

Según explicó ayer la presidenta autonómica, Susana Díaz, durante su visita a Marbella para inaugurar unas jornadas sobre el modelo territorial de la Costa del Sol, la Junta ultima un decreto sobre las competencias que tiene en ordenación del territorio y urbanismo que se va a presentar "como un proyecto para facilitar a los Ayuntamientos el reducir los plazos de tramitación de sus planeamientos urbanísticos".

Concretamente, según explicó Díaz, "es necesario que las comisiones provinciales de coordinación urbanística simplifiquen, integren y armonicen esos informes preceptivos que se tienen que emitir por parte de la administración andaluza".

El decreto que recogerá estos cambios se abordará en el consejo de gobierno del próximo mes de febrero.

Pero no es este el único cambio que la presidenta de la Junta quiere introducir en la normativa urbanística de la comunidad. Según adelantó ayer, el gobierno está analizando diversas normas, entre las que se encuentra la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA).

Según la presidenta el marco legal debe facilitar "iniciativas que busquen el desarrollo del territorio siempre desde el respeto a la sostenibilidad", a lo que añadió que "estamos en un momento distinto y hay que revisar nuestras normas y hacerlas compatibles con el desarrollo económico de Andalucía y el respeto a nuestro patrimonio natural".

Díaz recordó que se ha comprometido a dinamizar el sector de la construcción, del que dependen 600.000 personas en la comunidad que vivían del ladrillo y que se encuentran en paro desde el inicio de la crisis. Sin embargo la presidenta recordó que la obligación del gobierno andaluz es "buscar soluciones concretas para construir ciudades sostenibles" a través del compromiso de las administraciones con "políticas eficaces de gestión del territorio, dotación de servicios públicos de calidad y de infraestructuras".

Por su parte el que fuera presidente de la Junta y promotor de las jornadas que se desarrollan en Marbella, Rafael Escuredo, hizo hincapié en la necesidad de "establecer criterios de ordenación del territorio sin echar por tierra el Plan de Ordenación Territorial de Andalucía, documento que debe establecer las herramientas para que no vuelvan a producirse los excesos del pasado".

Y mientras esto sucedía dentro de la sede del Andalucía Lab, en el exterior del edificio miembros del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) de Marbella increpaban a la presidenta y al gobierno autonómico reprochándole la política de recortes llevadas a cabo en la Junta. Dentro del edificio, un grupo de monitoras de la consejería de Educación que se han visto afectadas por los recientes despidos también esperaban a la presidenta con camisetas moradas para recordarles que siguen en el paro y necesitan, al menos, la homologación del trabajo realizado.

Intensa jornada la de ayer en la que no se produjo ningún contacto oficial con el Ayuntamiento de Marbella cuya alcaldesa, Ángeles Muñoz, solicitó la semana pasada una reunión de trabajo con Susana Díaz coincidiendo con su visita a la ciudad.