A ojos de la Gerencia de Urbanismo, la construcción de una torre de 27 plantas, con una altura de 116 metros (según los promotores), no altera ni el modelo de ciudad ni el paisaje urbano de Málaga. Así consta en la respuesta dada a una de las alegaciones formuladas al trámite de modificación de elementos del Plan Especial del Puerto y a la que tuvo acceso este periódico. En concreto, la observación realizada correspondió a la Real Academia de Bellas Artes de San Telmo,que se viene mostrando crítica con el proyecto.

En su escrito, el colectivo subrayó el impacto que está edificación tendría sobre la urbe. Tesis a la que se oponen los técnicos municipales, que niegan que la construcción de un edificio pueda cambiar el modelo de ciudad. "Pensemos en el caso de ciudades como Barcelona (las dos torres del puerto olímpico) y Madrid (las cuatro torres de la Castellana)", exponen como ejemplos para razonar su contestación.

En cuanto a la afectación sobre el paisaje urbano, se aclara que el emplazamiento elegido para este edificio no forma parte del Pepri, "ni del conjunto histórico que delimita la ciudad histórica". Cabe recordar que el Ayuntamiento tramita actualmente una ampliación del Pepri para incorporar nuevos barrios, entre los que se encuentra La Malagueta, cuya localización está próxima al emplazamiento del nuevo edificio. 

El pronunciamiento municipal en este sentido cuenta con el respaldo de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía, que emitió un informe favorable a la operación urbanístico al no tener incidencia sobre el espacio protegido del casco antiguo.