Alrededor de 107 "bisiestos", los nacidos el 29 de febrero y que "solo" pueden celebrar su cumpleaños cada cuatro, se reúnen hoy en Málaga por pertenecer al club "VIPsiestos", que como su presidente, Francisco Carrasquilla, tienen hijos que hasta les "duplican" la edad.

Carrasquilla, que tiene 52 años reales pero este año "cumple" 13, ha explicado hoy a Efe que decidieron llamar así al colectivo porque son muy pocos los que nacen en tan señalado día.

En total hay unos 7.900 bisiestos en Andalucía y concretamente en Málaga 685, y ya en 2008 se reunieron para intentar batir un récord de juntar a más personas de este colectivo, aunque no lo llegaron a conseguir.

De todos los que se darán cita hoy provenientes de ciudades como Sevilla, Murcia, Valencia o de otros países como Alemania, el más "pequeño" tiene solo un año y otro "cumple" 22, que son en realidad 88, ha señalado Carrasquilla.

El presidente de este club tan especial confía en que a las tres de la tarde, hora en que muchos salen de trabajar, se unan más bisiestos a la reunión, que consistirá en una comida de cuyo importe se destinará una parte a la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER), coincidiendo con el día mundial de esta patología.

Sin embargo, no ve probable que esta vez se cumpla el récord Guinness porque al tratarse de un día laborable muchas personas no pueden asistir.

"En 2016 el 28 cae en domingo y se pasará al lunes 29", ha anunciado Carrasquilla, que ha dicho que entonces "sí habrá oportunidad" de optar al récord.

El club de los "VIPsiestos", dentro de la celebración de su cumpleaños, regalarán además una cesta prenatal al primer recién nacido de hoy en Málaga, aunque aún están a la espera de que termine el día para que les informen de su identidad, según ha manifestado.

Entre las anécdotas curiosas relacionadas con su día de nacimiento que le han sucedido a Francisco ha destacado que de pequeño tenía que esperar cuatro años para repartir caramelos a sus compañeros el día de su cumpleaños, o cómo cuando contaba 24 le gastaron la broma de impedirle la entrada a una discoteca por tener "sólo" 6 años.