Hace unos años Antonio Banderas reclamaba en un programa de máxima audiencia del prime time televisivo algo más de espíritu emprendedor por parte de los españoles. Si en su estancia en Estados Unidos había comprobado la tendencia de los estadounidenses a “ser su propio jefe”, aquí la sensación era que la búsqueda del confort y la comodidad de un puesto de funcionario primaban sobre la posibilidad de construir una empresa, un proyecto. No se puede confirmar si estas palabras de aliento son las raíces para que la ciudad de Málaga tuviese una mayor tasa de actividad emprendedora en 2020 que el resto de la provincia, Andalucía, España y cualquier otra de 16 comunidades autónomas, incluso Cataluña, que acostumbra a liderar estos registros.

La tasa de actividad emprendedora, según el informe GEM, alcanza en la capital el 7%, dato que supera, incluso, a la registrada en la provincia: un 6,1%. Andalucía en este apartado se queda en un 4,9% y España, en un 5,2%. Por comunidades, Cataluña, con un 6,6% y Cantabria (6,4%) registran los mayores valores.

El informe GEM (Global Entrepreneurship Monitor) Málaga, realizado por la Cátedra de Emprendimiento Sostenible de la Universidad de Málaga (UMA), es una referencia internacional para medir de manera homogénea el fenómeno emprendedor en diferentes territorios, facilitando un mayor conocimiento de los procesos de creación empresarial, así como su comparación y las posibilidades de emitir recomendaciones para su impulso y mejora.

Rafael Ventura, vicerrector de Innovación Social y Emprendimiento, fue el encargado de explicar los datos. Este 7% al que se refiere el informe quiere decir que siete de cada cien malagueños adultos estaban inmersos en crear y consolidar una nueva empresa (que cuente con más de 42 meses de vida). En estos datos se produce una brecha importante en cuanto al género “mayor que en los anteriores informes”, certifica Ventura, según la cual sólo el 3,2% de la población femenina se encontraría inmersa en un proyecto de emprendimiento, tasa que aumenta hasta el 8,7% entre los hombres.

“Al igual que en el conjunto de comunidades autónomas, la tasa de actividad emprendedora registrada en el año 2020 en Málaga provincia es inferior a la observada en el año 2019. Pero en términos relativos, la provincia destaca favorablemente sobre la mayoría de comunidades autónomas”, ha señalado Ventura refiriéndose al informe, que se realiza en colaboración con Promálaga.

En dicho año 2019, la provincia de Málaga reflejó los mejores datos de toda la serie, por lo que Ventura ha destacado este informe 2020 como una buena métrica para evaluar la influencia de la pandemia en el entramado emprendedor de la provincia. No es el caso de la capital, ya que este es el primer año que se incluye en el informe.

Seguirá en años posteriores la ciudad dentro del informe gracias a la adenda al Convenio de la Cátedra de Emprendimiento Sostenible que firmaron José Ángel Narváez, rector de la Universidad de Málaga, y Francisco de la Torre, alcalde de Málaga.

El estudio de la UMA también reivindica el potencial emprendedor malagueño a la hora de poner en marcha empresas de reciente creación. Así, el Informe GEM detalla que el 3% de la población de la capital participa en una sociedad con menos de tres años de actividad. Ese promedio también supera los datos provinciales (2,9%), andaluces (2,3%) y nacionales (2,4%), además del dato de la provincia malagueña en 2019 (2,3%).

Destacó Ventura que en este momento “hay que poner el foco en cómo favorecer el emprendimiento de alto impacto, que es lo que nos demanda la Málaga Tecnológica”, es decir cómo favorecer la creación de empresas que repercutan significativamente en el entramado y sean capaces de generar trabajo estable y bien remunerado además de generar unos ingresos elevados.