Nueva agresión en el ámbito sanitario en la provincia de Málaga. La tercera en la Axarquía desde el mes de abril. La última ocurrió durante la noche del jueves a un enfermero del Hospital Comarcal de la Axarquía que estaba al cuidado de un joven de entre 25 y 30 años que se encontraba "bastante agitado" según explicó Juanjo Bravo, delegado del Sindicato de Enfermería, Satse, en la comarca oriental. El paciente se encontraba en la sala de Observación de Urgencias cuando consiguió zafarse de la sujeción mecánica y propinó un puñetazo en la mandíbula al profesional sanitario que cayó "noqueado". El joven se escapó del centro hospitalario siendo localizado posteriormente por los agentes policiales que lo volvieron a ingresar.

"No sabemos si el joven sufrió un bruto psicótico pero sí le tuvo que golpear con bastante fuerza porque el enfermero es una persona corpulenta y cayó desplomado en el suelo", comentó el portavoz de este colectivo sindical quien según apuntó el sanitario presenta lesiones en la mandíbula, en un brazo y en la espalda.

El sanitario presenta lesiones en la mandíbula, el brazo y la espalda

Bravo informó que el próximo lunes habrá una concentración para condenar los hechos a las doce del mediodía en el Hospital Comarcal de la Axarquía. "Hay que concienciar a la sociedad que hay que tener tolerancia cero con las agresiones", sentenció el delegado del Satse en la Axarquía quien recordó que desde abril han sufrido en la comarca "tres agresiones muy duras a enfermeros y médicos, dos de ellas físicas y una verbal".

Los sindicatos sanitarios llevan desde hace años pidiendo más medios en los centros médicos para evitar que se sigan repitiendo lesiones a los profesionales que desarrollan allí su trabajo.

Hace diez días, el director del centro de salud de Vélez Norte fue amenazado de muerte e insultado por un paciente tras negarse a prescribirle una medicación.

A finales del pasado mes de abril, fue víctima de una agresión física una enfermera del centro de salud Vélez Sur. Una mujer de 45 años, propinó una patada en el pecho a una enfermera cuando le estaba cogiendo una vía tras desvanecerse en la calle.