El Ayuntamiento de Málaga encarrila de manera ya definitiva la entrada en vigor de sus presupuestos para 2021. La propuesta formalizada por el equipo de gobierno ha sido aprobada este martes en un Pleno extraordinario y urgente con los votos a favor de los concejales del Partido Popular, Ciudadanos y el edil no adscrito Juan Cassá, mientras que, como ya se había anunciado, el PSOE ha optado por la abstención, y Adelante por el voto negativo. Una vez ratificadas las cuentas en la Casona del Parque, queda pendiente de culminar el procedimiento, lo que ocurrirá antes de finalizar el presente mes.

En términos absolutos, las previsiones alcanzan los 900 millones de euros en gastos, destacando el incremento que tienen los capítulos de inversión, con 131 millones (un 62% más que el ejercicio pasado) , mediante los que se pretenden desarrollar 477 actuaciones. La mayor parte de ellas, al menos en lo que a la cuantía se refiere, estarán promovidas por la Gerencia de Urbanismo, que vuelve a ser el gran motor inversor, con 47 millones.

Al tiempo, es de destacar el crecimiento que tienen las partidas sociales, hasta alcanzar los 121 millones, un 20% más. Los números son igualmente relevantes en Medio Ambiente, con 212 millones, mientras que Cultura, Turismo, Deportes y Educación reciben 60,7 millones.

Para compensar la pérdida de ingresos, estimada en 25 millones como consecuencia de la crisis del Covid, el Ayuntamiento se ve en la necesidad de acudir a los bancos, a los que va a pedir 76 millones de euros; esto es, 56,3 millones más que el año pasado. A pesar de ello, el nivel de endeudamiento apenas se elevará hasta el 60%.

Son las grandes cifras de unos presupuestos que, a ojos del equipo de gobierno, son una especie de "vacuna a esta profunda crisis económica y social derivada de la pandemia". "Vienen a rescatar a las personas, a dar oxígeno al tejido productivo y a acelerar más si cabe la recuperación", ha defendido el concejal de Hacienda, Carlos Conde, durante el debate plenario, en el que ha incidido en que además refuerza los servicios públicos para que la ciudad esté preparada "para esa ansiada recuperación, para continuar el esfuerzo de ayuda a los colectivos más afectados y contribuir a la recuperación con un importante plan de inversiones". 

Conde ha puesto en valor, además, el esfuerzo de diálogo realizado por los diferentes grupos políticos. "Son unos presupuestos fruto del consenso y el diálogo". "Cuando no hay trincheras, ni ombligo nos damos cuenta de que tratándose de Málaga son más los intereses que nos unen que los que nos separan", ha reconocido en referencia al PSOE, que se ha abstenido.

En una línea parecida se ha pronunciado Noelia Losada, portavoz de Cs. "Creo que estos presupuestos son un balón de oxigeno para la ciudad; están marcados por la moderación fiscal y contemos la deuda", ha dicho, al tiempo que ha aprovechado para lanzar un mensaje claro respecto a la continuidad del Ejecutivo de coalición actual. "Málaga tiene un gobierno de garantías, un pacto sólido entre Cs y el PP que cristaliza en unas cuentas que pretenden ofrecer respuestas a la pandemia", ha afirmado.

El portavoz socialista, Daniel Pérez, ha valorado la posición de su grupo en el intnto de acercar posturas con el equipo de gobierno y mejorar el documento final. A pesar de ello, y de haber logrado introducir algunas de sus demandas, ha calificado de "muy mejorable" el texto final. "No son las cuentas que hubiésemos querido", ha añadido, criticando la imposición de la zona azul en Cruz de Humilladero y Echeverría de Huelin, el aumento del personal directivo o la negativa a celebrar consultas ciudadanas para determinar el futuro del Astoria o la torre del puerto. "Por el bien de Málaga hemos llegado a este acuerdo de abstención, pero no es un cheque en blanco", le ha recordado al alcalde, Francisco de la Torre.

Mas crítico ha sido el concejal de Adelante Nicolás Sguiglia, que se ha reafirmado en su voto negativo. Ha recordado la existencia de una deuda histórica con los barrios y con la sostenibilidad y las políticas verdes. "Son unos presupuestos insuficientes, no dan los pasos necesarios que consideramos para avanzar con valentía hacia una ciudad más justa e igualitaria", ha manifestado, echando en falta, por ejemplo, "partidas claras para atender el volumen de paro de la ciudad". Incluso, ha ironizado con la existencia de una reserva de apenas 16.000 euros para carriles bici, "que no alcanzan ni para barrer un carril bici", lo que entra en conflicto con la apuesta municipal por la movilidad sostenible.