El Ayuntamiento de Málaga activó ayer la cuenta atrás para, en un escenario optimista, ver abierto al público el hotel proyectado en el dique de Levante en el año 2024. Es decir, dentro de seis años. Lo hizo acordando la aprobación inicial de una modificación de elementos del Plan Especial del Puerto indispensable para, primero, asignarle uso hotelero al suelo elegido para levantar la torre de 150 metros y, segundo, autorizar la ejecución de un complejo de unos 43.000 metros cuadrados de techo. Este parámetro es siete veces superior a lo que en el planeamiento actual se permite sobre esta misma parcela. En concreto, lo único que se dibuja en el documento es un edificio satélite con un techo tope de 6.000 metros cuadrados.

El paso adoptado ayer por la Junta de Gobierno Local implica la puesta en marcha de una cuenta atrás que, solo en el trámite administrativo y burocrático pendiente, requerirá de al menos año y medio. O así lo creen la promotora del inmueble, un grupo de inversión catarí, y la Autoridad Portuaria, que en su propuesta de adecuación urbanístico viene a plantear como un escenario "optimista" la posibilidad de que el proyecto cuente con todos los parabienes de las administraciones, no solo en el plano urbanístico, para el año 2020. Y a partir de ahí, al menos tres años de obras.

El aval municipal dará paso, según explicó el concejal de Ordenación del Territorio, Francisco Pomares, a la apertura de un periodo de información pública de al menos dos meses. Este periodo medirá de manera clara el nivel de contestación a la iniciativa, por cuanto será en ese momento cuando los colectivos y vecinos interesados puedan presentar sus alegaciones a la propuesta de intervención. Ayer mismo, el grupo Málaga para la Gente, ya anunció que formulará sugerencias.

Y a la par, desde el instante mismo en que el acuerdo de la Junta de Gobierno Local sea publicado en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), se remitirá la modificación del planeamiento portuario a los entes sectoriales que tienen que informar de la misma: Aviación Civil, la Delegación de Cultura y de Turismo de la Junta de Andalucía. En ambos casos, sus pronunciamientos son preceptivos y vinculantes. La publicación del acuerdo no será inmediata, ya que, según reconoció Pomares, se le ha requerido al Puerto a que complete ciertos detalles de la documentación.

La siguiente etapa será la aprobación provisional de la modificación, que corresponderá al Pleno, requiriéndose posteriormente informe al Consejo Consultivo de Andalucía. Un paso que no estaba inicialmente previsto pero que, a tenor del análisis jurídico, se opta por demandar debido a que el hotel obliga a eliminar un espacio en la actualidad catalogado como zona verde. La aprobación definitiva quedará en manos de la Junta, si bien la validez de todo este trámite quedará condicionada a la autorización final por parte del Consejo de Ministros, que tendrá que levantar la prohibición actual de desarrollar usos habitacionales en los suelos portuarios.

Por otro lado, la Junta de Gobierno Local también aprobó solicitar a la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio la autorización para realizar obras en zona de policía del dominio público hidráulico para vía ciclista y senderista a través del río Guadalmedina. El trazado discurriría por la berma izquierda, desde el puente de Armiñán hacia el norte, hasta el final bajo el puente de la Autovía A-7, a la altura del Jardín Botánico. El recorrido abarca desde la presa del Limonero-Montes de Málaga a la desembocadura del Guadalmedina, con una longitud de 5,17 kilómetros. El presupuesto de licitación supera los 1,1 millones.