El Puerto reclama un plan especial para redefinir los usos de San Andrés
Plata pide abrir un debate de la mano del Ayuntamiento sobre el futuro de la parcela en beneficio "de la ciudad y del Puerto"
El Puerto de Málaga quiere forzar la apertura de un debate institucional en torno al futuro de los suelos de San Andrés. Enquistados desde hace años la apuesta del alcalde, Francisco de la Torre, por levantar en este espacio el Auditorio de la capital de la Costa del Sol, y el proyecto de puerto deportivo en la zona, el organismo portuario da un paso adelante con el fin de desbloquear el estado de letargo en el que se encuentra esta plataforma. Y el primer movimiento consiste en proponer al Consistorio la redacción de un plan especial específico, en el que definir los usos alternativos que permitan rentabilizar un suelo que forma parte del patrimonio portuario.
"Queremos estudiar cual es el mejor uso que se le puede dar, tanto para la ciudad como la el puerto", explicó ayer el presidente del Puerto, Paulino Plata, quien ayer compareció junto al director del ente, José Moyano, para hacer balance del ejercicio 2015. A juicio de Plata, se trata de una parcela que "merece una pensada, un estudio mediante el que soslayar algunas de las dificultades con las que se han venido encontrando los proyectos hasta ahora planteado". A modo de ejemplo, aludió a la necesidad de que el puerto deportivo, proyecto abandonado tras ser adjudicado para su ejecución, disponga de un acceso directo con el Paseo Marítimo Antonio Machado, del cual carece en la actual ordenación.
Si bien Plata eludió definir los usos que a juicio del Puerto han de ser predominantes, sí fue claro al poner en duda la opción de mantener la reserva original de 31.000 metros cuadrados para el Auditorio. "Hay que tener en cuenta que en esa zona hay otra parcela para uso cultural, con lo que se suman ahora unos 40.000 metros cuadrados", expuso. De manera resumida, uno de los objetivos marcados es el de favorecer "la proyección del puerto deportivo, con el fin de que sea atractivo".
"Con el planeamiento actual no tenemos manifestación de interés alguno por actuar en el mismo", insistió Plata. Una circunstancia que viene frenando desde hace meses la idea del Puerto de volver a sacar a concurso su construcción y explotación después de haber logrado rescatar la concesión original. "No tiene sentido porque no hay demanda; hay que pensarlo con el Ayuntamiento", incidió.
En el seno del Puerto se viene manejando la posibilidad de potenciar los "servicios complementarios" a la marina futura, incrementando los usos comerciales inicialmente reservados. Ello sin renunciar, necesariamente al uso cultural demandado por el Consistorio, aunque ello mediante algún tipo de concesión que permita a la Autoridad Portuaria obtener algún beneficio económico por su ocupación.
Hasta la fecha, el Puerto ha puesto sobre la mesa diversas opciones tendentes incluso a que se haga con la pastilla del Auditorio, valorada en unos 16 millones de euros, en compensación, parcialmente, de la deuda que la institución portuaria tiene asumida con el Consistorio en concepto de IBI; o la posibilidad de recibir a cambio aprovechamientos urbanísticos. Ninguna de estas propuestas ha recibido respuesta afirmativa.
La apuesta por esta iniciativa es una de las incluidas por Plata en la hoja de ruta del nuevo año, en el que se busca "mejorar la gestión y el aprovechamiento del dominio público portuario y patrimonio de ser concesionado". En este marco de actuación se encuentra, igualmente, la propuesta para ejecutar un centro comercial en los terrenos de Muelle Heredia, actuación impulsada por la empresa Malaga Port Mall, que a finales del pasado año abonó el aval necesario para poner sobre la mesa del Puerto la ejecución de esta iniciativa.
Al respecto, Plata confirmó que los técnicos del organismo siguen analizando la documentación de la propuesta antes de poder tramitar un concurso para el espacio. No obstante, esta iniciativa empresarial requiere, previamente, de un acuerdo con el Ayuntamiento para ajustar el plan especial del Puerto en lo concerniente a autorizar el uso comercial de todo el aprovechamiento autorizado en esta franja de terreno, ascendente a unos 28.000 metros cuadrados. La actual configuración del espacio mezcla el uso de oficinas, mayoritario, con el comercial; sin embargo, esta tipología, según indican desde el Puerto, no genera interés entre potenciales inversores. Cabe recordar incluso que el concurso impulsado en 2011 por el ente quedó desierto ante la ausencia de ofertas.
"Ahora no hay demanda.para nada más que para comercial; hay que ser claro y no podemos estar reabriendo debates ya sustanciados", expuso Plata, quien fue contundente al señalar que todo lo que no sea plantea un centro comercial supondrá dejar la parcela como está en este momento. Asimismo, subrayó la necesidad de "tomar decisiones ya", dada la existencia de una empresa que espera una resolución. Plata defendió, como ocurre con los aeropuertos y las estaciones de trenes, que el Puerto incremento la oferta comercial actual, al objeto de dar respuesta a la demanda de los alrededor de 700.000 pasajeros que anualmente pasan por el recinto.
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