El alcalde de Marinaleda, diputado autonómico y líder del movimiento jornalero, Juan Manuel Sánchez Gordillo (IU-CA), ha asegurado que las detenciones de componentes de la 'marcha obrera', organizada por el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), que habían ocupado una sucursal bancaria de Málaga son "absolutamente innecesarias", y ha incidido en que las acciones se hacen "desde la no violencia activa y sin ningún incidente puesto que no se molesta al trabajo y sólo es una ocupación simbólica".

Al respecto, el diputado de IU por Málaga, Alberto Garzón, que junto al secretario general del SAT, Diego Cañamero, ha acompañado a los 12 detenidos en la ocupación de la sucursal a la Comisaría de Policía, ha indicado en declaraciones a Europa Press que se les detuvo por los cargos de desorden y desobediencia y ha indicado que la idea era "que quedaran en libertad de uno en uno", una vez terminados los trámites correspondientes.

Sánchez Gordillo ha destacado el "entusiasmo, cercanía y cariño de la gente" que ha seguido la marcha en Málaga, que partió este martes de la Fuente la Reina y terminó en la plaza de la Constitución. "El pueblo de Málaga ha dicho claramente que está con la marcha, que está con la utopía, por un mundo mejor, por otra Andalucía, por otra política económica y por un ser humano nuevo que es lo que estamos demandando", ha asegurado.

Ha apuntado que era "el momento de decir basta, de señalar el camino diferente de la crisis" y ha destacado que "el pueblo andaluz se lanza a la calle y dice que ha llegado el momento de que la utopía se ponga en marcha y que la lucha sea el camino de una sociedad diferente, de un mundo diferente y una Andalucía diferente". Ha asegurado, al respecto, que el objetivo es "llegar a cambiar la sociedad, hasta llegar a una sociedad realmente justa".

Por su parte, el secretario general del SAT, Diego Cañamero, ha afirmado que esta marcha "intenta conectar con la población, que haya un debate en la sociedad y que se entienda que no se puede estar financiando a los banqueros, a los culpables de la crisis", al tiempo que ha lamentado que "están robando todos los derechos conquistados en los últimos años".

Ha apuntado que se ocupan bancos "para señalar a los culpables, porque la crisis existente no podemos pagarla con dinero público, no podemos quitárselo a los pensionistas, ni a la pequeña empresa ni a los autónomos", considerando que el pueblo tiene "miles de razones para seguir luchando". Ha considerado "desmesurada" la presencia policial que ha acompañado a la marcha desde su inicio.

Desde primeras horas de la mañana ha sido numerosa la presencia policial en el Camino del Colmenar y en la plaza Olletas, a donde la marcha ha llegado sobre las 11.15 horas. Momentos antes de que la marcha obrera, que bajaba los Montes de Málaga, hiciera su entrada a la capital más de 10 vehículos de la Policía Nacional estaban en la zona.

Además, la manifestación ha estado en todo momento precedida de furgones policiales, incluso ha sido constante la presencia de agentes de la Policía Nacional en las inmediaciones de las sucursales y supermercados ubicados en las calles por donde pasaban los participantes en la marcha.

Una vez pasada la zona de la Aduana, algunos de los manifestantes han intentado desviarse y llegar a la entidad bancaria ubicada en la Alameda Principal, que ya había sido ocupada por otros miembros del SAT, para mostrar su "solidaridad" con los compañeros que allí estaban y que finalmente resultaron detenidos y fueron trasladados a la Comisaría de Policía.

Por esto, se ha producido un pequeño incidente a la entrada de la calle Larios que ha obligado a Cañamero, Romero y Garzón a hablar con el comisario general de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional Florentino Villabona, para organizar de nuevo la marcha. En ese momento, fue detenido el secretario de organización de la Unión Local de Cuevas de San Marcos, José Blanco, quien no obstante fue puesto en libertad al poco tiempo.