Seis de la tarde. Los bañistas observan que un conductor se adentra con un vehículo de color negro en la playa de Rincón de la Victoria y comienza a recorrerla. Sobresaltados y con la zozobra de no saber cuál es su intención, deciden llamar a la Policía. Uno de los testigos graba la inédita estampa. Las imágenes, difundidas a través de las redes sociales, recogen el momento en el que el vehículo que protagoniza los hechos, ocurridos el martes, parece haber quedado encallado y continúa circulando por la arena. Según el autor del vídeo, el conductor "iba dando bandazos".

Una mujer explicó a este periódico que se encontraba en la playa cuando se percató de que un vehículo había accedido a la arena y metían varias cosas en el maletero. Cuando el conductor quiso salir comprobó que el coche se había quedado encallado. "Sacaron alfombrillas para ponerlas debajo de las ruedas y salir de ahí. Al ver que no podían dieron marcha atrás, pero cuál fue nuestra sorpresa que lo vimos avanzar hacia adelante a toda velocidad. Nos levantamos de la silla corriendo y empezamos a gritar que estaba loco. Dio la vuelta a nuestro lado y salió al paseo marítimo. Nos llevamos un gran susto", explicó una de las bañistas, que llegó a ver que el vehículo era inglés dado que tenía el volante en la parte derecha.

La Policía Local se movilizó para localizar el automóvil siguiendo la descripción facilitada por los vecinos. Fuentes de la investigación indicaron que una patrulla consiguió identificarlo "11 minutos después de transitar por la playa en una actuación rápida gracias al uso de un sistema de geolocalizador". El coche pudo ser detenido al inicio de calle Limoneros. "La colaboración ciudadana fue esencial para lograr detener este vehículo", destacaron las mismas fuentes.

Una vez interceptado, los agentes comprobaron que en el interior del coche viajaban tres personas, dos hombres y una mujer embarazada, todos de origen iraní y con domicilio en Londres. El conductor argumentó que pretendían visitar la Cueva del Tesoro de Rincón de la Victoria y que se había despistado. Ante los hechos, la Policía Local abrió diligencias por un presunto delito contra la seguridad vial. El hombre que iba al volante fue denunciado por supuesta conducción temeraria. Asimismo, los policías procedieron a la intervención del vehículo al no haber quedado acreditada su titularidad. Desde el grupo municipal socialista exigieron "explicaciones" por el incidente ocurrido.