Menos de tres semanas faltan para la semana grande de los cofrades y muchos seguro que ya empiezan a mirar al cielo con preocupación después de lo que ha ocurrido en los dos últimos años en los que la lluvia truncó la salida procesional de numerosas cofradías por culpa de la lluvia. Ni con toda la tecnología del momento se puede predecir con tanta antelación qué tiempo hará este año durante la Semana Santa, pero el Centro Meteorológico de Málaga sí ha dado una idea de lo que puede ocurrir si se atienden a las estadísticas de lo que ha pasado del 24 al 31 de marzo en los últimos 70 años. En ese tiempo, y según el estudio de los datos meteorológicos desde 1942, ha llovido apreciablemente al menos un día en 50 de los 70 años analizados y al menos dos días en la mitad de los casos.

Por término medio cada período del 24 al 31 de marzo, días con los que este año coincide la Semana Santa, tiene 5,8 días sin precipitaciones estadísticamente hablando. De hecho, en 407 de los 560 días estudiados, es decir, en el 73% de los días no ha llovido nada, y solo en 121 días la precipitación ha sido apreciable o superior a 0,1 litros por metro cuadrado. Sin embargo, si no se incluyen los días en los que ha llovido menos de esa cantidad, los últimos ocho días de marzo tienen de media 6,3 días sin precipitación y 1,7 días con lluvia.

Únicamente son estadísticas, pero puede invitar a la esperanza el hecho de que en 14 de los 70 años analizados por el Centro Meteorológico de Málaga no hubo ninguna precipitación y, además, en seis de esos años la lluvia caída total fue inapreciable. Más concretamente, en nueve de los últimos veinte años no ha llovido en Málaga de forma apreciable. La media de precipitación diaria en los años que ha llovido durante esa semana ha sido de 2,2 litros por metro cuadrado.

De todos, el días más lluvioso durante los últimos 70 años ha sido el 28 de marzo, que este año coincide con el Jueves Santo. Sin embargo, si solamente se tienen en cuentan las precipitaciones mayores de un litro los más lluviosos han sido los días 28 y 29 de marzo. Por contra, el menos lluvioso de las últimas décadas es el día 26. Desde 1942 ha llovido uno de cada tres veces el 28 de marzo; uno de cada cuatro el 29 (Viernes Santo); uno de cada cinco los días 24, 25, 30 y 31 (Domingo de Ramos, Lunes Santo, Sábado de Pasión y Domingo de Resurrección, respectivamente), y uno de cada seis los días 26 y 27, es decir, Martes y Miércoles Santo este año.

En cuanto a la hora en la que estadísticamente ha llovido más en las últimas siete décadas, el Centro Meteorológico ha observado mayor probabilidad de lluvia hacia el mediodía y la medianoche y menos hacia el atardecer en la capital malagueña. Pero, según el informe, las precipitaciones que ocurren entre el mediodía y el atardecer suelen ser de corta duración producidas frecuentemente por chubascos procedentes de nubosidad de evolución diurna, ya que las nubes se desarrollan en las horas centrales del día por efecto del calentamiento del suelo. En cambio, las precipitaciones que se producen cerca del atardecer se deben casi siempre a sistemas en términos meteorológicos llamados sinópticos, es decir, de larga duración.

La buena noticia es que el 44% de los días en los que ha llovido la precipitación ha durado menos de una hora. En cambio, en el 54% de las ocasiones la lluvia ha durado menos de dos horas y en el 71% de los casos se han prolongado durante menos de tres horas. La mayor duración de la precipitación durante la última semana de marzo históricamente se observó el 28 de marzo de 2004 que llovió durante 17 y diez minutos. Habrá que seguir mirando al cielo.