Aún no hay fecha, pero ya está decidido: un equipo móvil de Sevilla se desplazará en breve para operar en Málaga. El objetivo es aligerar las listas de espera del Hospital Carlos Haya.

La intención es que los profesionales sevillanos trabajen el fin de semana completo e intervengan a pacientes con patologías menores que, aunque no revisten gravedad, engrosan las listas de espera y ponen en peligro el cumplimiento del plazo máximo de 180 días que se autoimpone el Servicio Andaluz de Salud (SAS) para una operación. Según fuentes fiables, los enfermos que rechacen esta opción -bien porque no quieran operarse un sábado o un domingo, o porque no deseen ser intervenidos por cirujanos que no sean del Carlos Haya- perderán el derecho a ser operados en 180 días.

El equipo sevillano hará intervenciones de Traumatología, una de las especialidades con la lista de espera más abultada. A Málaga se desplazarán un cirujano, un anestesista y hasta un auxiliar. Se harán operaciones poco complejas, como juanetes o artroscopias.

La decisión ha causado cierto malestar entre los trabajadores. Un técnico explicó que este sistema de cruzar equipos se utiliza para que los profesionales de un servicio no "autogeneren" listas de espera para beneficiarse luego con la realización de "peonadas". La dirección del hospital malagueño ya ha mantenido una reunión con el equipo que vendría del Virgen Macarena.

Las fuentes consultadas por Málaga Hoy aseguraron que "es la primera vez" que se produciría este apoyo quirúrgico externo. Al menos, en Traumatología. Hace unos años, los equipos móviles se utilizaron en Oftalmología. El hospital, en cambio, aseguró ayer que esta colaboración de fuera es "normal".

Las fuentes consultadas indicaron que en alguna ocasión profesionales de Málaga se han trasladado a Córdoba, pero no a Sevilla.

Una portavoz del Hospital Clínico apuntó que en este centro, cuando es necesario reducir la lista quirúrgica o de pruebas diagnósticas, se recurre a los centros concertados y que el apoyo externo de otros sanitarios del SAS, cuando se produce, es por colaboración profesional. Los decretos que fijan los topes máximos que un paciente debe aguardar contemplan esta salida para que el SAS pueda cumplir los plazos que se ha impuesto. Estos son de 120 y 180 días según las intervenciones, de 60 para una primera consulta con un especialista y de 30 para una prueba diagnóstica.

Lo primero que harán los profesionales que se desplacen de Sevilla es ver a los pacientes para saber si están dispuestos a operarse en fin de semana y con ellos. Después les harán las pruebas preoperatorias y finalmente serán citados para la intervención. El seguimiento ya corresponde a los profesionales del Carlos Haya.