El Ayuntamiento de Málaga dispondrá de algo más de 10 millones de euros procedentes de fondos europeos para impulsar el proyecto de rehabilitación de la zona de los arrabales del centro histórico y el entorno de la calle Carreterías. Para financiar este proyecto, cuyo coste global se estima en 15 millones, el equipo de gobierno del PP solicitó colaboración en el marco de la convocatoria del Plan Urban 2007-2013, cuyo objetivo es impulsar la recuperación de espacios degradados. Y la petición ha sido finalmente atendida por el Ministerio de Economía y Hacienda, encargado de seleccionar las intervenciones merecedoras de esta aportación.

Málaga capital es una de las 43 ciudades a nivel nacional que se benefician de estos fondos, que acaban de ser repartidos, y que suman una inversión total de 542,51 millones de euros, de los que serán pagados con fondos comunitarios más de 346 millones. En el caso de la iniciativa malagueña, la actuación diseñada por el equipo de gobierno del PP pasa por recuperar algunos de los espacios más degradados del casco antiguo, entre los que se incluyen las calles Pozos Dulces y Nosquera; Dos Aceras y la Plaza Montaño, y Beatas y Tomás de Cózar. En todos estos puntos se proyectan obras de reurbanización, con el fin de adecentar puntos que se encuentran en muy malas condiciones. Cabe destacar que la última de las delimitaciones, la de Beatas y Tomás de Cózar, está plagada de edificios en ruina, y todo ello a escasos metros del principal icono cultural de la ciudad, el Museo Picasso.

Pero la propuesta municipal no prevé sólo mejorar el aspecto de las vías, sino que aboga, igualmente, por apuntalar el desarrollo de esta parte del centro mediante la implantación de nuevos equipamientos sociales y culturales. En este sentido, destaca la idea de dar forma a un centro de coordinación para el cambio climático en la Plaza Montaño, la instalación de una red telemática de control de los limitadores acústicos, la puesta en marcha de un programa de apoyo a los comercios de la zona y de iniciativas empresariales, y la implantación de una ludoteca municipal y un centro de participación en la plaza Pericón.

Para el alcalde, Francisco de la Torre, la aprobación por parte de la UE de las peticiones realizadas por el Ayuntamiento "avala y reconoce el trabajo realizado desde 1995 para recuperar el centro histórico y pone de manifiesto la confianza de la institución europea en las políticas sostenibles llevadas a cabo por el gobierno municipal".