El Consejo de Gobierno de la Universidad de Málaga ha aprobado hoy crear tres nuevos institutos de investigación, en solitario o en colaboración con otras universidades, y la decisión final la tendrá la Junta de Andalucía. En una larga jornada con numerosos puntos, también se decidió endurecer las medidas para evitar el fraude académico –máxime con todos los problemas que ha habido, por ejemplo, con los másters en la universidad Rey Juan Carlos I en Madrid–, sacar más plazas de profesor y se confirmó el nombramiento de Felipe Romera y María Emilia Casas como doctores honoris causa, entre otras cosas.

Empezando por el principio, la UMA apoya la creación de tres institutos de investigación sobre música, tecnologías lingüísticas y comunicación. El primero de ellos es el Instituto Universitario de Tecnologías del audio, la música, la voz, el sonido y sus aplicaciones para la sociedad. Este proyecto está lanzado por la UMA junto a las universidades de Jaén, Granada y Sevilla y, según ha explicado la universidad malagueña en un comunicado de prensa, su objetivo es “avanzar en la frontera del conocimiento en el ámbito del sonido en sentido amplio y en todas las posibles aplicaciones que estas tecnologías tendrán para la sociedad en distintos campos como la salud, el entretenimiento, el aprendizaje, etcétera”.

El segundo es el Instituto Universitario de Investigación en Tecnologías Lingüísticas Multilingües. Este centro quiere promover que se hagan y se publiquen investigaciones en esta materia, destacando aquellas relacionadas con la traducción, la interpretación, los recursos electrónicos o la lexicografía.

Por último, el tercer proyecto aprobado por el Consejo de Gobierno de la UMA es poner en marcha el Instituto Andaluz de Investigación en Comunicación y Cultura, en este caso en unión con las universidades de Sevilla y Granada. “Se reivindica el papel esencial de la comunicación social contemporánea en la creación, transmisión y promoción de los bienes culturales de todo tipo (museística, artes escénicas, artes plásticas, patrimonio) y su integración en el seno de las industrias culturales y creativas”, afirman.

Este fue uno de los aspectos más llamativos. Pero hubo más. La UMA ha apoyado el Plan de Actuaciones de la Inspección de Servicios para el próximo curso y, según destacaron, “se incorporan por primera vez a este plan nuevas medidas orientadas a prevenir el fraude en el ámbito académico, como el análisis de diligencias de modificación de calificaciones cuando éstas se produzcan mucho tiempo después de la firma de actas, o la realización de jornadas o conferencias sobre cómo abordar problemáticas emergentes (plagio, publicación en revistas fraudulentas, trabajos por encargo…)”. Se van a vigilar más los trabajos fin de grado y de fin de máster, así como las tutorías virtuales.

Por otra parte, el Consejo de Gobierno de la UMA ha aprobado la creación de dos plazas de profesorado catedrático y seis de profesorado titular para los funcionarios y de 117 plazas de profesorado ayudante doctor y 14 de profesorado asociado para los contratados.