Agentes de la Policía Local han detenido a un hombre de 55 años y vecino de la capital tras amenazar con un cuchillo a un vigilante de seguridad de un chiringuito en Málaga. Se le considera presunto autor de un delito de amenazas tras insultar y coaccionar al vigilante con un cuchillo de grandes dimensiones.

Los hechos tuvieron lugar poco antes de la medianoche del jueves al viernes 19 de julio, cuando, presuntamente, el individuo apareció por el lugar a la hora del cierre del chiringuito, ubicado en el paseo marítimo Antonio Banderas, comenzando a insultar y amenazar a la víctima, un hombre que desempeña labores de seguridad en el establecimiento, todo ello en presencia de varios clientes que fueron testigos de los hechos.

Presuntamente, la víctima le solicitó que abandonase el lugar, percatándose de que portaba un cuchillo en la espalda, sacando, al parecer, el mismo y esgrimiéndolo al mismo tiempo que le decía: "ven que te voy a rajar", según ha explicado la Policía Local de Málaga en una nota de prensa.

Según parece, en ese momento, varios viandantes se acercaron al individuo recriminándole su actitud, lo que motivó que este ocultase el cuchillo y huyese del lugar.

Tras recibirse llamada en la Sala 092 de la Policía Local de Málaga informando de los hechos, una dotación de dicho cuerpo se personó con premura en el lugar y entrevistó tanto a víctima y testigos, reconociendo el primero que no se trataba de la primera ocasión en la que recibía insultos y amenazas por parte del individuo, ya que estas se venían sucediendo cada vez que este pasaba por allí, desde hacía unas tres semanas, cuando lo echó de una caseta con la que cuenta el establecimiento.

Los policías locales localizaron instantes después al individuo saliendo de un parque infantil cercano, en el que se encontraban varios menores que se asustaron al verlo, procediendo a su inmediata detención. Tras ello, el individuo fue trasladado a dependencias policiales, para, posteriormente, ser puesto a disposición judicial.

En cuanto al arma blanca, fue intervenida por los policías locales, tratándose de un cuchillo de grandes dimensiones, midiendo concretamente su hoja 20 centímetros.