El sábado 14 de marzo de 2020, el buque de crucero Marella Dream llegaba a Málaga de urgencia para cancelar la ruta turística que estaba realizando. Un día después, los pasajeros que viajaban en él desembarcaban, y la actividad crucerística en las aguas malacitanas quedaba paralizada debido al estado de alarma provocado por el inicio de la pandemia del Covid-19.

Tras sucederse a posteriori algunos atraques de este este tipo de barcos, ya sin pasajeros y solo realizando operativas de desembarque de tripulantes, aunque también se dieron algunos embarques, el puerto de Málaga, que sirvió de refugio durante 58 días consecutivos al buque Sovereign, cumple ahora un año sin escalas crucerísticas; una circunstancia que suscita, en este momento, la gran incógnita de cuándo y cómo volverán los barcos de turistas.

Y sin que exista una respuesta clara acerca de cuál será la fecha en la que se retomará la actividad crucerística, tanto el Puerto como Málaga Cruise Port (la empresa que gestiona las terminales dedicadas a los cruceros), esperan que, una vez liberada la prohibición que el Gobierno español mantiene sobre estos tráficos, las compañías de barcos de turistas vuelvan a posicionarse en los muelles malagueños; una posibilidad que, según ha podido saber Málaga Hoy, podría empezar a vislumbrarse en el trimestre veraniego.

Ante esta incertidumbre y con tan sólo, a fecha de hoy, siete de las 40 más significativas compañías crucerísticas internacionales ya navegando con sus buques de turistas (todas ellas con muchas restricciones y limitaciones tanto a bordo como en tierra), la planificación de atraques para el presente ejercicio se presenta muy complicada.

Con un año, el 2020, en el que sólo pasaron por los muelles crucerísticos malagueños 10 buques diferentes cumplimentando un total de 19 escalas con pasajeros, la totalidad de los trabajadores que, de una forma u otra están implicados en el sector de los barcos que llegan al puerto de Málaga con turistas, esperan el pronto regreso de los cruceros.

Una ansiada vuelta cargada de dudas y que, al menos durante el ejercicio de 2021, no se parecerá en nada a lo que había antes. Un regreso marcado por una crisis sanitaria global que tras torpedear muy seriamente a la industria crucerística, también ha afectado mucho a los puertos que, como el de Málaga, recibían un muy significativo número de escalas de barcos de turistas.

Más información sobre marítimas en El blog de Juan Carlos Cilveti: La mar de historias.