Calidad de vida en Andalucía

Los andaluces nos ponemos una nota de 6,9 a nuestra vida

  • Los jóvenes trabajadores con educación superior y tiempo libre son los que están más satisfechos

Miles de personas intentando batir un récord de baile de malagueñas en la calle Larios

Miles de personas intentando batir un récord de baile de malagueñas en la calle Larios / Alvaro Cabrera (Málaga)

¿Está usted satisfecho con su vida, con su trabajo, con sus relaciones sociales? ¿Confía en los demás? Puede que a usted le vaya bien, mal o regular en este valle de lágrimas que escribía Fernando de Rojas en La Celestina pero, ¿qué cree que piensan el resto de ciudadanos? Estas preguntas, que suenan un tanto etéreas, no solo se pueden medir de forma científica sino que el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía le ha puesto una nota media por edades, sexo, formación o hasta actividad económica.

Los andaluces, en general, le ponían un 6,9 a su vida en 2018. Es un aprobado alto que no es para tirar cohetes pero, al menos, son dos décimas más que en el mismo estudio sobre el bienestar publicado por este organismo en 2013.

Los que están más satisfechos, a grandes rasgos, con su vida actual son las personas más jóvenes. Los que tienen desde los 16 hasta los 44 años le ponen un 7,2 a su día a día, una calificación que baja hasta el 6,6 entre las personas de entre 45 y 64 años y al 6,5 entre los mayores de 65 años. A mayor edad, más probabilidad hay de tener enfermedades o padecimientos y más cerca se ve el final aunque hay que resaltar que el grupo de mayores de 65 años más negativos, es decir, aquellos que se ponen entre un 0 y un 4, es reducido (un 15%).

La satisfacción en el colectivo de personas de 30 a 44 años se ha elevado en cinco décimas en cinco años, probablemente por la recuperación económica ya que esa edad suele ser sinónimo de fuerte hipoteca e hijos pequeños.

La sensación de bienestar varía en función de muchas variables y una evidente es la situación laboral. Como pueden imaginar, los andaluces que se encuentran en paro son los menos positivos –se ponen un 6–, aunque, dentro de lo que cabe, es un aprobado, un hecho que demuestra que el andaluz lleva el optimismo en las venas incluso en circunstancias poco favorables. En el polo opuesto están los trabajadores, que ven más fácil pagar las facturas todos los meses y que se dan un 7,3. Siempre se piensa que estar jubilado es la panacea al cobrar, normalmente, una pensión sin tener nada que hacer, pero la estadística no lo corrobora. De hecho, los jubilados dicen que tienen un 6,7 en satisfacción con su vida.

Varias personas pasean por el centro de Málaga. Varias personas pasean por el centro de Málaga.

Varias personas pasean por el centro de Málaga. / Javier Albiñana (Málaga)

Trabajar es agotador, pero, si no se es un derrochador, evita estar agobiado al final del mes. Habitualmente, el tipo de trabajo y de salario suele estar ligado a la formación, aunque no siempre es así. En cualquier caso, los andaluces que aseguran estar más satisfechos con su vida actual son los que han recibido una educación universitaria (7,7) y esa nota va descendiendo de forma proporcional al nivel de estudios, reflejando aquellos que tienen educación primaria o inferior una satisfacción media de 6. Los andaluces –no hay datos provincializados– dicen que, en general, están satisfechos con su puesto de trabajo actual (una nota media de 7,1), siendo más reducida la calificación en el grupo de personas de 16 a 29 años (6,7) porque suelen tener condiciones más desfavorables en el mercado laboral. En este caso, aquellos que poseen una educación universitaria también son los que están más contentos con su puesto de trabajo (7,7) y los que tienen educación primaria o inferior los que menos (6,3).

No obstante, todo el mundo querría poseer más dinero, independientemente del tipo de trabajo que tenga como demuestra el hecho de que, al ser preguntados por la satisfacción con la situación económica del hogar, la puntuación media es de un 5,7, aprobado raspado.

Otro dato llamativo de este informe es cómo de satisfechos están los andaluces para hacer lo que les apetezca en el momento que quieran. Aquí ganan por goleada los dos colectivos que, a priori, tienen menos responsabilidades y más tiempo libre. Las personas de más de 65 años se ponen un 7,6 y los menores de 29 años un 7,1. Entre los 30 y los 64 años –cuando la carga laboral y familiar suele ser mayor– el grado de satisfacción es de solo un 6,3.

La mejor nota nos la ponemos todos los andaluces a la hora de hablar de nuestras relaciones personales: un 8,4 de media. Pensamos que elegimos bien a nuestros amigos o a las personas que nos rodean, pero no confiamos tanto en los desconocidos y en la Humanidad en general: un 6,3 de media. En 2013 era un 6,5, por lo que vamos para atrás. También es cierto que no ayuda nada leer cada día las noticias y ver las atrocidades que se cometen.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios