Persiste el conflicto con los enfermeros que tratan los ictus en el Hospital Regional. Son sólo ocho, pero hacen un trabajo muy cualificado y específico. Estos profesionales amenazan con ir a la huelga porque se les han “empeorado” sus condiciones laborales de forma “unilateral” por la dirección, según denuncian.
Como hacen un trabajo tan concreto y –según denuncia el Sindicato de Enfermería (Satse)– la plantilla es “insuficiente”, se tienen que cubrir entre ellos para vacaciones, permisos y bajas. Fuera de su jornada de 8:00 a 15:00, los que están de guardia deben estar localizados y con capacidad de llegar al hospital en 30 minutos.
Por esta disponibilidad percibían unos 300 euros al mes en concepto rotatorio, que la dirección les retira porque entiende que es irregular. Ellos amenazan con dejar las guardias a partir del 1 de octubre.
El hospital indica que la Dirección de Enfermería “no ha recibido notificación” de los profesionales del código ictus ni de los representantes de los trabajadores. Además, señala que la dirección está realizando una revisión de los conceptos retributivos de la plantilla.
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