La fuerza del viento y la luz del sol pueden empujar a Málaga y al resto de la comunidad autónoma a salir de la grave crisis económica en la que se encuentra. Un informe elaborado por la Asociación de Promotores y Productores de Energías Renovables de Andalucía (Aprean), cuya sede está en Málaga, señala que la puesta en marcha de nuevos parques eólicos, centrales fotovoltaicas o centrales de biomasa generarán en la provincia 10.500 empleos hasta el año 2013. Éstos se sumarán a los 2.500 puestos de trabajo que ya existen en este sector en Málaga. En el conjunto andaluz, en los próximos cinco años se crearán, según esta patronal, 105.000 empleos, cuatro veces más que ahora.

El sector de las energías renovables no se está viendo afectado por la crisis ya que las Administraciones Públicas, empezando por la Junta de Andalucía, están colaborando para impulsar este tipo de energías limpias y restar la dependencia del petróleo o el carbón. Mariano Barroso, presidente de Aprean, destacó ayer que hasta el año 2013 se van a abrir numerosas instalaciones en la provincia y en Andalucía, y precisó que los puestos de trabajo que se creen serán estables durante 25 años ya que ése es el plazo de amortización de un parque eólico o una central fotovoltaica. "También hay que tener en cuenta que este tipo de instalaciones no se pueden deslocalizar a Marruecos o cualquier otro sitio, por lo que siempre va a estar garantizado el empleo en ese municipio". En definitiva, "tratamos de lanzar un mensaje de optimismo precisamente en un momento como el actual en el que hay tanto paro", continuó Barroso.

La delegada provincial del gobierno andaluz, María Gámez, acompañó ayer a Barroso en la presentación del informe y destacó que "la energía renovable es una de las prioridades del Gobierno andaluz y nuestro objetivo es que en 2013 represente el 15% de la energía que se genera en la región, frente al 10,6% actual".

El presidente de Aprean siempre ha sido crítico con la Junta de Andalucía desde el punto de vista de la lenta tramitación burocrática y ayer no desaprovechó la ocasión para lanzarle un tirito a Gámez. "Tenemos financiación y voluntad empresarial para hacer proyectos. Sólo pedimos que hasta el último funcionario de la Junta de Andalucía se implique y elimine todas las trabas burocráticas posibles siempre dentro del cumplimiento de la ley. No queremos que haya más demoras en las tramitaciones", dijo Barroso. De hecho, según este empresario, se tardan seis meses en levantar un parque eólico y, en algunos casos, se han empleado 10 años hasta su puesta en funcionamiento. Gámez recogió el guante y aseguró que "estamos concienciados en que hay que dar la máxima celeridad a todo tipo de proyectos, no sólo de energías renovables sino de creación de empresas, y así lo hemos transmitido a todas las Administraciones, aunque las normativas garantizan la seguridad de las instalaciones y eso exige dar varios pasos burocráticos".