Los números del Metro de Málaga vuelven a desconcertar. Cuando parecía aclarada la secuencia de financiación que tiene ante sí la Junta de Andalucía para compensar económicamente la explotación comercial del ferrocarril urbano, otro informe de la Cámara de Cuentas cuantifica en casi 3.000 millones de euros el aporte que tendrá que realizar la Administración regional para garantizar el funcionamiento de los trenes entre los años 2014 y 2042, anualidad en la que finaliza el periodo de concesión. Una suma que la Consejería de Fomento sitúa en 2.856 millones desde 2015 en adelante.

Ambas magnitudes ponen de relieve nuevamente la dimensión que tiene para las arcas públicas el desarrollo, primero, y el mantenimiento de este medio de transporte público, que abrió sus puertas de manera parcial a mediados del año 2014. Al tiempo, suponen una significativa variación sobre los parámetros manejados por la propia Agencia de Obra Pública de Andalucía en el año 2013, cuando, según otro informe de la Cámara de Cuentas, la cuantía que se tendría que satisfacer desde 2014 hasta que expire el contrato era de 2.197 millones de euros. Es decir, que entre ambos informes el crecimiento de la losa económica es de 659 millones de euros.

¿Qué es lo que motiva este incremento? El propio organismo autonómico, en una alegación formulada al Informe de la Cuenta General y de Fondos de Compensación Interterritorial de la Junta de Andalucía. 2014, que fue denegada, justificaba el crecimiento observado en "que en dicho ejercicio (2014) tiene lugar un hito importante en el desarrollo del proyecto". "Concretamente, se realiza una redefinición del mismo, acordada con la concesionaria, BEI y Ayuntamiento de Málaga que da lugar a un reequilibrio del Plan Económico Financiero de la Concesionaria y a una modificación del contrato de concesión", apostilla.

Se refiere a la modificación del trazado pactada para eliminar la llegada del trazado hasta La Malagueta y su sustitución por un tajo soterrado hasta la Alameda y, en superficie, hasta el Hospital Civil. Esta variación, según insisten desde el ente autonómico, dio lugar a una actualización de los compromisos presupuestarios vinculados al proyecto, "tanto de explotación como de capital".

Adicionalmente, en la citada alegación, se advertía de que el importe de las "remuneraciones" que se prevé realizar al operador de las líneas 1 y 2 del Metro desde 2015 hasta el final de la concesión "es de 2.856,74 millones de euros, en lugar de los 2.988,82 millones que aparecen en el informe (esta última cifra es la cifra desde 2014 hasta el final de la concesión".

El contraste es, si cabe mucho mayor, si se toma como punto de partida el original. En este sentido, el acuerdo adoptado por el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía en 2004 fijaba unos costes de explotación del Metro de 1.096 millones de euros, lo que supone más de 1.800 millones menos. El informe de la Cámara de Cuentas aporta además datos relativos a la construcción de los dos ramales del suburbano. En concreto, entre los años 2004 y 2015 admiten un importe de la inversión a ejecutar de 657,50 millones de euros. El desglose anual precisa que de esta suma 511 millones han sido ejecutados en el intervalo de 2009 a 2014, destacando los 122,33 millones de euros ejecutados en 2011 y los 119 millones de 2012.

La adjudicación inicial de la obra situaba el valor de la misma en poco más de 363 millones de euros, a los que sumar 41 millones de euros del material móvil. Sin embargo, los numerosos modificados introducidos por la Administración regional en el desarrollo de los trabajos, ante la inclusión de mejoras en la infraestructura, el aumento del soterramiento del trazado y ajustes técnicos no contemplados en el anteproyecto, han acabado por disparar de manera apreciable la inversión necesaria.

Estos números están pendientes aún de ser cerrados, dada la necesidad de culminar el trazado. A la llegada a la Alameda, ya en ejecución, y al Civil (pendiente), del Hospital Civil, hay que sumar la terminación del tramo entre El Perchel y la estación Guadalmedina. Con todas estas piezas, la previsión es que el coste final de la obra roce los 800 millones.