Teniendo en cuenta que la estación invernal se considera temporada baja y que el tráfico de buques de crucero sólo alcanza, en este primer mes del año, un muy reducido goteo de escalas a la semana, la jornada de ayer puede considerarse especial porque se completó con la visita de dos buques de turistas; dos barcos que ya coincidieron en el puerto el 5 de enero. Además puede considerarse el primer gran desembarco de turistas en el puerto malagueño después de la tragedia del Costa Concordia fren te a la isla italiana de Giglio.

Costa Serena y MSC Fantasia traían a bordo a un total de 6.459 pasajeros y 2.365 tripulantes en tránsito, los cuales, durante algunas horas, pudieron disfrutar de diversas excursiones y recorridos turísticos por el centro de la ciudad en un día frío y nublado.

Procedente de Funchal, el MSC Fantasia atracaba a las seis de la mañana en el muelle de Levante, mientras que el Costa Serena, llegado desde Arrecife de Lanzarote, quedaba amarrado en el muelle norte de la estación Marítima de Levante minutos antes de las ocho. Estos dos buques dejaban Málaga con una hora de diferencia (Costa Serena salía a las 13:00, y el MSC Fantasia a las 14:00), partiendo ambos con destino al puerto italiano de Civitavecchia.

Pero independientemente de lo que deparó la jornada crucerística de ayer, lo más significativo del viernes malagueño de turistas de barco, fue la presencia del Costa Serena, gemelo del recientemente accidentado Costa Concordia.

Segundo de una serie de seis buques (los dos últimos con ciertas modificaciones y mejoras) denominados Clase Concordia, el Serena, en 2011 sólo visitó una vez Málaga, aunque su relación con el puerto de la capital de la Costa del Sol es muy estrecha y significativa, ya que este buque fue el encargado de inaugurar con pasajeros la terminal sur de la estación marítima de Levante el 29 de febrero de 2008.