Málaga

"Lo que más me gusta de este oficio es el dinero que no gano y los animales"

Como cada mañana, Juan Manuel Melero, comienza su jornada laboral a las 6:00. Es el momento de bajar las vacas del monte, prepararles el pienso, ordeñarlas y limpiar el establo. Este ganadero de 58 años lleva realizando este trabajo toda su vida. "He crecido con ellas porque en mi casa siempre las ha habido, antes teníamos las vacas de trabajo, que eran las castellanas hasta que nos pasamos a las suizas, ahora además, tenemos un toro limousín, para obtener los becerros de carne", explicaba.

Su explotación se encuentra en un lugar privilegiado, en la falda de El Torcal, concretamente en una zona conocida como La Escaleruela, a cinco kilómetros de Antequera, donde sus 22 vacas y dos toros viven al aire libre puesto que sólo acuden al establo a beber y dos veces al día para su ordeño. Para ir renovando su ganadería, Melero cuenta con un toro suizo, de la misma raza que sus vacas. Se trata de un oficio que requiere jornadas largas de trabajo y que para este ganadero junto a su familia lo es todo, "lo que más me gusta de este oficio es el dinero que no gano y sobre todo los animales, aunque reconozco que es un trabajo muy sacrificado, que no te permite descansos ni vacaciones, ahora puedo permitirme algo porque mi hijo está más grande y me puede echar una mano algunos días".

Al igual que las tierras han ido pasando de padres a hijos, también lo ha ido haciendo el oficio. "Aunque como están los tiempos, a mi me gustaría que mi hijo tuviera otra profesión, no obstante, si cambiaran las cosas en este sector, éste sería un buen futuro para él". Cuando se le menciona la crisis, Juan Manuel comenta que "las vacas siempre han estado en crisis, la leche lleva 25 años al mismo precio, a treinta céntimos el litro y antes, cuando se vendía la leche por la calle, el litro costaba cincuenta pesetas". Recuerda con alegría, que el pasado año tuvieron tres meses muy buenos, ya que en el mes de marzo, el litro se lo pagaron a cincuenta céntimos "nos llamaban de todos los sitios porque querían nuestra leche y ahora no la quieren de ningún lado". / gema gonzález

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