Los huertos que los trabajadores chinos de las naves industriales del polígono del Guadalhorce han cultivado durante años no son un caso aislado. Muchos de los jardines del recinto han sido ocupados de forma ilegal para uso ornamental o como parte de las propias naves. Ahora el Ayuntamiento de Málaga va a iniciar una inspección para comprobar qué zonas verdes están siendo usadas con la intención de informar a los responsables de que está completamente prohibido.

Los cultivos en los jardines de algunas calles de este polígono han sacado a la luz otros casos de ocupación ilegal de estas zonas. Según explicó ayer el concejal de Polígonos Industriales en el Ayuntamiento de Málaga, Manuel Marmolejo, el objetivo es "informar a los trabajadores del polígono que no se puede invadir la vía pública para uso particular".

Sin embargo, el Consistorio malagueño no tiene previsto multar a ninguno de ellos, ya que la intención en un futuro es eliminar la mayor parte de estos jardines para hacer nuevos aparcamientos en batería que eviten que los coches aparquen en doble fila.

El edil aseguró que en la próxima reunión prevista con la Asociación de Polígonos de Málaga (Apoma) se dará cuenta de este proyecto que se llevará a cabo en algunas calles para descongestionar el tráfico.

Pero en aquellas zonas donde no sea posible, Marmolejo adelantó que se adecentarán los jardines con la plantación de césped y nuevas plantas "para no convertir el polígono en un bloque de cemento".

Respecto a los huertos que los chinos habían plantado en plena calle del polígono, el edil aseguró que "la situación está absolutamente controlada". Los mismos trabajadores de estas naves se encargaron de retirar los cultivos ante el aviso de la Policía Local de Málaga.

El Ayuntamiento de la capital les había dado un plazo de 24 horas para que arrancaran las plantaciones.