Voluntarios de la Protección Civil se han encargado desde primera hora de la mañana de repartir en las paradas de taxi, estaciones de autobuses y cooperativas agroalimentarias las 2.550 mascarillas de tipo quirúrgicas que el Gobierno central destinó a Ronda tras la vuelta al trabajo de parte del sector económico y al recomendar el uso de este tipo de protección.

Además, por las calles de Ronda el uso de este sistema también se generaliza entre la población y, aunque no es obligatorio su uso por la calle, la gran mayoría sigue la recomendación de llevarla si es posible, hasta el punto de que es complicado encontrar a personas que no las lleven.

Clientes y trabajadores suelen llevarlas puestas, aunque muchos de ellos relatan los problemas que están teniendo para encontrar este tipo de protección, ya que en las farmacias tan solo es posible encontrar las del tipo quirúrgica, que han llegado recientemente.

Entre los empresarios hay también malestar por el elevado precio al que se están ofreciendo los equipos de protección que el Gobierno está obligando a utilizar a partir de este lunes, en los casos en que consiguen encontrarlos.