Huía a gran velocidad de la Policía Local por la zona de Carranque mientras, supuestamente, lanzaba a la carretera bolsas que contenían hachís y cocaína. Circulaba sin manos y con la Inspección Técnica desfavorable desde hacía dos años. El conductor a la fuga era un motorista de 30 años que protagonizaba una persecución tras haberse percatado de la presencia policial.

La actuación se inició hace unas semanas, sobre las 17:30, en calle Virgen del Rocío. Una patrulla uniformada había observado que un turismo con cuatro ocupantes detenía su marcha. Según la versión policial, el copiloto introdujo su mano en un bolsillo al aproximarse un motorista con una riñonera. Cuando ambos se vieron sorprendidos se fundieron en un abrazo mientras fijaban su mirada en los agentes.

El conductor de la moto recibió el alto y, presuntamente, hacia calle Corregidor Nicolás Isidro. Los efectivos activaron los dispositivos acústicos y luminosos para advertir al resto de usuarios de la vía de la persecución que había dado comienzo. La fuga continuó hacia calle Benagalbón, donde soltó las manos del manillar para lanzar varias bolsas a la vía pública.

El conductor perdió el control de la moto al deshacerse de la droga y terminó cayendo

Durante la huida, un peatón que cruzaba por un paso de cebra dio un salto hacia atrás para evitar ser atropellado, según la Policía. El motorista rebasó un semáforo en fase roja y se dirigió a la plaza Manuel Azaña, junto a la Comisaría provincial de la Policía Nacional de Málaga. En ese punto volvió a conducir sin manos para deshacerse de más bolsas, que contenían hachís y cocaína.

Tras pasar por una arqueta situada en calle Virgen de la Cabeza, el conductor perdió el control del vehículo y cayó al suelo. Llegó a deslizarse por el asfalto y sufrió varias heridas, aunque ninguna de ellas graves. El accidente obligó a los agentes que lo perseguían a realizar una maniobra esquiva. El coche policial impactó “levemente” con la motocicleta.

Los policías localizaron varias de las bolsas que el individuo había arrojado, pero el revuelo ocasionado dificultó la búsqueda. El motorista fue detenido por un presunto delito contra la salud pública por tráfico de drogas y otro contra la seguridad vial por conducción temeraria. Los efectivos le imputan además un tercer delito de resistencia y desobediencia a agente de la autoridad.