El temporal marítimo de levante del domingo apenas duró unas horas, pero fue tan intenso que hacía 20 años que no se producía uno igual. No es una mera percepción. Los datos analizados en frío no dejan lugar a dudas. La ola máxima registrada llegó a los 6,53 metros de altura en el Puerto de Málaga, aunque eso no fue lo más llamativo. Lo fue el hecho de que la altura media de las olas fue de 4,3 metros, una marca excepcional que no se había repetido desde 1995.

Los expertos la conocen como la altura media significante y mide la continuidad de un tercio de las olas más altas registradas durante cada una de las horas que dura el temporal. Y en base a ese cálculo, según el jefe de la Demarcación de Costas de Málaga, Ángel González, el temporal del domingo "no fue ninguna tontería porque en 20 años no habíamos visto uno así".

Para que la altura media de las olas sea de 4,3 metros durante un temporal, explicó que tienen que producirse numerosas olas de entre tres y cinco metros durante el tiempo que dure y en Málaga no es tan habitual que ocurra algo así.

La excepcionalidad del fenómeno meteorológico ocurrido el domingo lo atestigua también la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Ángel Alcázar, su portavoz, aseguró que olas de tanta altura "no pasa con tanta frecuencia en las costas de Málaga", aunque sí es más propio en otras zonas como Almería.

Lo curioso no es solamente que el temporal de levante azotara con tanta virulencia el litoral malagueño, sino que además lo hiciera acompañado de fuerte viento en tierra con rachas de hasta 80 kilómetros por hora y suelo saturado de agua por las precipitaciones. "Es llamativo y raro que se hayan unido las tres cosas en un corto espacio de tiempo", indicó.

Pero ¿por qué ocurrió algo así? La explicación dada por Aemet es que la situación meteorológica era "bastante singular" motivado por la confluencia de dos escenarios. Por un lado, la depresión aislada en niveles altos de la atmósfera que llegaba desde las Islas Canarias responsable de las precipitaciones y, por otro, los restos de una baja del Mediterráneo causantes de los fuertes vientos de levante.

Ambas situaciones se convirtieron en un cóctel molotov que estalló, entre otras zonas, en la costa malagueña provocando un temporal de levante como se recuerdan pocos entre las 16:00 y las 20:00 de la tarde que dio paso a la formación de tormentas con fuertes aguaceros hasta bien entrada la noche.

El último coletazo del temporal dará paso a un tiempo estable

La pasada madrugada y las primeras horas del día de hoy estaba previsto que estuvieran pasadas por agua en algunos puntos de la provincia de Málaga. La Costa del sol, la comarca del Guadalhorce y la Axarquía se encuentran en alerta amarilla por el riesgo de que se registren precipitaciones intensas hasta el mediodía de hoy. Hasta 15 litros por metro cuadrado podrían acumularse en sólo una hora en estos puntos en los que se vivirá el último coletazo de este temporal que remitirá definitivamente a partir de esta tarde. A partir de entonces, las previsiones meteorológicas anuncian una clara mejoría del tiempo que se prolongará con casi total seguridad durante toda la semana. Las lluvias se alejan definitivamente de la provincia y el tiempo estable se impondrá hasta nuevo aviso.