Málaga finalizó el pasado mes de febrero con menos personas apuntadas en las oficinas del paro que en enero, algo que no ocurría desde el año 2007. El descenso fue pequeño, apenas 456 ciudadanos, pero es importante el simbolismo que conlleva pues el invierno es la peor etapa para el mercado laboral en la provincia y, a partir de ahora, deben venir tiempos mejores con la llegada de la Semana Santa a finales de marzo y la entrada de la primavera. Se ha pasado, por tanto, la tormenta y, aunque el número de parados sigue siendo ingente, se ha salido con cierta solvencia.

El Servicio Andaluz de Empleo (SAE) tenía contabilizados el mes pasado a 196.660 parados, un 0,2% menos que en enero y un 6,4% menos que en febrero del año pasado. Dicho de otra forma, ahora hay 13.447 desempleados menos que hace un año. Solo ha descendido más el desempleo en un año en términos absolutos en Madrid, Barcelona, Alicante y Valencia. En Andalucía, Málaga es la provincia donde más ha caído el paro en el último ejercicio tanto en número de personas como en porcentaje, según los datos oficiales publicados ayer por el Servicio Público de Empleo Estatal (Sepe).

El paro afecta más a las mujeres que a los hombres y eso se debe en parte a su intento por incorporarse al mercado laboral. Hay 23.475 personas paradas que no tenían un empleo anterior y la mayoría (15.638) son mujeres. Se da además la circunstancia de que dentro de ese grupo cerca de la mitad tiene más de 44 años. Muchas de estas personas son amas de casa que no han trabajado nunca fuera del hogar y que ahora buscan una oportunidad.

Si se analizan los sectores se puede apreciar que el mayor descenso mensual del paro en febrero tuvo lugar en el sector de la construcción (-730 personas), mientras que en los servicios y la industria hubo también disminuciones. Sí subió en la agricultura y en el colectivo de personas sin empleo anterior.

La segunda buena noticia, unida al menor desempleo, es que siguen creciendo las afiliaciones a la Seguridad Social. En febrero se dio de alta a 3.634 personas más, hasta alcanzar un total de 509.682 cotizantes. Hay 25.540 más que hace un año, el mayor incremento porcentual y en volumen de Andalucía y el cuarto más importante de España tras Madrid, Barcelona y Valencia. De hecho, en Málaga ha crecido el número de afiliados en un año cerca del doble que en todo el País Vasco o cinco veces más que en la comunidad de Navarra. Eso se ha debido, en parte, a la fortaleza de los autónomos, que superan los 102.000 en la provincia.