Superado el primer mes del estado de alarma decretado por el Gobierno central para frenar el crecimiento del coronavirus puede decirse que el puerto de Málaga mantiene una intermitente actividad que, según ha podido saber Málaga Hoy, se prolongará durante las próximas semanas.

Reducidas las navegaciones en línea regular y compartiendo carga rodada, Baleària y Trasmediterránea están manteniendo activa la cadena de suministros con la ciudad de Melilla, mientras que, en las últimas semanas, los muelles malagueños han movilizado graneles sólidos y líquidos además de contenedores.

Sin ninguna actividad crucerística y parados totalmente los tráficos de buques cocheros (dos sectores fundamentales en las aguas malagueñas), el puerto está afrontando esta crisis con las restricciones propias de un estado de alarma sanitaria; un hecho que, tras una reducción inicial de las llegadas y la consiguiente preocupación por parte de todas las empresas que operan en los muelles, evolucionará en base a la actividad marítima internacional.

El último balance oficial realizado por la Autoridad Portuaria se corresponde con los datos acumulados en el primer trimestre del ejercicio, en el que se registro un aumento de la actividad del 45,5% respecto al mismo periodo de 2019. En este sentido, desde el organismo presidido por Carlos Rubio destacaron el comportamiento de la actividad agroalimentaria, con un 71% de aumento, destacando el movimiento de cereales y su harina, así como de pienso y forrajes. Esta operativa se incluye en el movimiento general de granel sólido, que fue de 360.558 toneladas entre enero y marzo, 87,2% más.