Uno de los inmigrantes internados en la futura cárcel de Archidona se ha suicidado hoy en la celda que ocupaba, han informado fuentes policiales. Estas fuentes han explicado que el hombre ha sido encontrado ahorcado en la celda con una sábana.

La cárcel de Archidona fue habilitada como centro de internamiento de inmigrantes (CIE) a raíz de la oleada de inmigrantes argelinos que llegó a las costas murcianas a finales del mes de noviembre.

Más de 500 de esas personas fueron internadas en la cárcel, cuyo funcionamiento como centro penitenciario comenzará a finales de enero, e Interior comenzó desde ese momento los procedimientos de expulsión.

Los inmigrantes han protagonizado varias protestas desde entonces por las malas condiciones del centro, al tiempo que el Defensor del Pueblo detectó "numerosas carencias" en la cárcel y puso en duda su idoneidad para ser utilizada como centro de internamiento de extranjeros.

El portavoz de la Plataforma Solidaridad con los Inmigrantes, Luis Pernía, se mostró conmocionado tras conocer la muerte de uno de los inmigrantes internados en la futura cárcel de Archidona, asegurando que "en estos momentos estoy noqueado".Pernía recordó el "trauma" que supone para estas personas en hecho de ser recluidos sin haber cometido ningún tipo de delito y el hecho que conlleva el tener que hacer frente al pago de una importante deuda que suele contraer toda la familia para sufragar el viaje, que suele oscilar entre los 5.000 y los 6.000 euros.

Además, aseguró que este tipo de centros de internamiento "son peores que la prisiones", y es que asegura que no cuentan con un protocolo establecido como sí tienen los centros penitenciarios en los que se cuenta con intérpretes para explicar a los internos los procedimientos.

La asociación Málaga Acoge ha pedido la paralización de las devoluciones de los internos en la futura cárcel de Archidona y una "investigación profunda" sobre los hechos ocurridos. “Pedimos una investigación judicial completa y por supuesto la paralización absoluta de todas las devoluciones previstas para dar transparencia al proceso, porque puede ser que se expulse a testigos o personas que puedan aportar algo sobre lo que ha pasado”, ha señalado el vocal de la Junta Directiva de Málaga Acoge, José Luis Rodríguez.

Rodríguez lamentó que en la cárcel de Archidona se estén reproduciendo todos los "males" que afectan habitualmente a los Centros de Internamiento de Inmigrantes (CIE), con "menores ingresados, solicitantes de asilo expulsados, denuncias por abusos y suicidios”, señaló.

Además, recordó que el Defensor del Pueblo alertó en la visita que realizó al centro penitenciario sobre “el deber legal de que hubiese cámaras de vigilancia en la cárcel y de garantizar la integridad de los internos”.

“Esto viene a ser una vuelta a la situación de los CIE”, lamentó la presidenta de Málaga Acoge, Arantxa Triguero, en referencia también al CIE de Málaga, clausurado en 2011 tras dos décadas plagadas de sucesos, entre ellos suicidios de personas internadas. Esta asociación ha exigido que se depuren responsabilidades por los hechos ocurridos.

El secretario de Políticas Migratorias y Exterior del PSOE de Málaga, Antonio Yuste, ha pedido la comparecencia del ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, en el Congreso. Los socialistas reclaman a Zoido que explique las causas de la muerte del interno, y que "ponga fin a esta sin razón".

La cárcel de Archidona "no puede ser un centro de reclusión de más de 500 personas que huían de la pobreza en sus propios países y que no han cometido ningún delito", ha sostenido Yuste, quien ha calificado de "error" el uso de este centro para el internamiento de extranjeros.

Por su parte, la senadora de Podemos Andalucía, Maribel Mora, calificó la muerte de un inmigrante en la futura cárcel de Archidona como "una desgracia anunciada", al tiempo que arremetió contra la política migratoria española basada en los internamientos en los conocidos como CIE.

Además, arremetió contra el trato "inhumano" que, a su juicio, han tenido los inmigrantes en Archidona, a los que asegura que se les mantuvo durante los primeros 12 días con la misma ropa, que algunos de ellos seguían llevando chanclas, denunciando falta de comida y con problemas para comunicarse con sus abogados o con sus familias.

En este sentido, también criticó que se hubiese respondido con antidisturbios ante ciertas situaciones que se habían producido. Por ello, reclamó el cambiar las políticas migratorias y adaptarlas para respetar los derechos humanos.