El televisor, que mantiene su protagonismo en los hogares pese al avance de los dispositivos móviles, puede convertirse en un aliado para mejorar la vida de las personas con enfermedad de alzheimer, según los impulsores de un proyecto europeo de investigación que coordina el Hospital Regional de Málaga. A través de una plataforma instalada en los televisores y conectada a internet se pretende dar consejos a los enfermos, controlar su medicación, recordarle citas médicas y ayudarles a que realicen juegos para entrenar la memoria.

"Somos conscientes de que hay una brecha digital, que tres de cada cuatro mayores de 65 años no han entrado nunca en internet", y de que el dispositivo que "conocen y utilizan" a diario es la televisión, afirmó el psiquiatra Fermín Mayoral, líder de la iniciativa y responsable del grupo de investigación de Salud Mental del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA).

De ahí surge la idea de instalar la plataforma digital en la televisión doméstica para ofrecer atención a las personas con estadios leves de demencia y sus cuidadores, que se ha plasmado en el proyecto TV-AssistDem, que se desarrolla en el marco de Horizonte 2020, financiado por la Unión Europea. Mayoral destacó ayer la importancia de este proyecto por el impacto económico, social y familiar del alzhéimer, que se prevé que crezca hasta 2050 por la evolución demográfica, con un mayor peso de los mayores de 65 años.

Los profesionales que participan en el proyecto, que actualmente está en fase de pruebas, van a reclutar a un centenar de pacientes malagueños para que participen desde finales del próximo octubre en el ensayo clínico, cuyos resultados se unirán a los de otros cien participantes de Rumanía.

El objetivo es detectar a mayores de 65 años que hayan mostrado en los últimos seis meses deterioros cognitivos o estadios iniciales de demencia que vivan en sus domicilios sin cuidador, con el fin de enviarles alertas para que no pierdan sus hábitos. Además, el sistema permitirá a los usuarios comunicarse por iniciativa propia mediante videoconferencia tanto con profesionales como con familiares y cuidadores.

Al término del ensayo se evaluarán los problemas que han tenido los enfermos en el uso de la plataforma, y si ha servido para mejorar la adherencia al tratamiento y su calidad de vida. Se calcula que unas 123.000 personas padecen alzheimer en Andalucía, cuyo perfil es el de una persona mayor de 75 años que comienza a olvidar los hechos recientes de horas o días atrás con fallos en sus funciones y con trastornos de conducta que llaman la atención a la familia.

El neurólogo responsable de la unidad de Demencia del hospital malagueño, Tomás Ojea, definió el alzhéimer como la "plaga de este siglo" y subrayó la importancia del diagnóstico temprano para frenar el avance de esta enfermedad, en el que es crucial el papel de la familia, ya que si no lo detecta "el enfermo no llega al sistema sanitario". El proyecto liderado por el Hospital Regional de Málaga se desarrolla en Italia, Suiza, Rumanía y España por un consorcio de cinco centros de I+D y la Federación de Asociaciones de Alzheimer (AFA).

En el Hospital Regional de Málaga existe una Unidad de Memoria que cada año atiende 3.500 consultas. Esta atiende a enfermos nuevos derivados de Atención Primaria y otras especialidades, además de revisiones de demencias.