Málaga

El último caso de yihadismo en Málaga, el del joven que anunció que iba a inmolarse en Manilva

Momento de la detención

Momento de la detención

El último caso relevante en Málaga sobre yihadismo ocurrió en enero de 2019, cuando un joven de 27 años fue detenido tras anunciar en un vídeo su intención de hacerse explotar en la feria de Manilva.

A través de su perfil en redes sociales, Anwar Andalosi, el investigado, M.L., manifestó ser un soldado del Estado Islámico y juró expresamente, con el discurso oficial del Dáesh, lealtad al líder del Estado Islámico Omar Bakr El Baghdadi, de modo que la Policía tomó la decisión de reventar la operación, practicándose entrada y registro en su domicilio, en Manilva.

Málaga ha sido una provincia que siempre ha estado en el mapa del yihadismo internacional. En la primera sentencia dictada en España contra una célula dedicada a captar yihadistas para enviarlos a Siria e Iraq, en 2016, se demostró que una red envió entre abril de 2012 y mayo de 2013 al menos a nueve personas a través del aeropuerto de la Costa del Sol. La mayoría de ellos murieron poco después en atentados suicidas, entre los que figuran el ataque a la cárcel de Abu Ghraib en Bagdad (Iraq), que facilitó la huida a un millar de reclusos en julio de 2013.

En 2014, la Audiencia Nacional desmanteló una red que enviaba yihadistas a Siria y otros países, y entre los detenidos había uno que residía en Málaga. Se trata de Ben Amara Elmedjeri, que fue arrestado en Málaga y que se dedicaba supuestamente a falsificar documentos. Ya fue detenido el 24 de febrero de 2006 por pertenencia a organización terrorista.De acuerdo con Interior, la célula se encargaba de reclutar a voluntarios para la “guerra santa” e integrarse en grupos terroristas de la órbita de Al Qaeda, especialmente radicados en países en conflicto como Mali y Siria.

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