Casi dos años han tenido que esperar las 90 familias de la barriada de Cortijo de Montes y San Isidro para recibir los terrenos que el Ayuntamiento de la capital se comprometió a cederles gratuitamente en la zona de Churriana para construir las casas que Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) les expropió para poder ampliar el aeródromo malagueño. La larga tramitación burocrática por la que ha tenido que pasar el acuerdo ha retrasado más de lo previsto la cesión de una parcela de la Finca Dos Hermanas, dedicada en la actualidad al cultivo de cítricos, donde estos vecinos podrán empezar de nuevo y que curiosamente está también junto al aeropuerto de Málaga al que han estado vinculados toda la vida. Más de la mitad ya lo han hecho por su cuenta a lo largo de estos años y "han optado por comprar otra vivienda en otro sitio porque ya no podían esperar más tiempo", explicó ayer a este periódico Julio Franquelo, el presidente de la cooperativa que tuvieron que constituir para construir y financiar las nuevas.

Los vecinos contarán con unos terrenos suficientes para levantar 50 casas, con una parcela de unos 120 metros cuadrados cada una y 90 metros cuadrados útiles. El único requisito que deberán asumir, según el convenio que firmaron con el Ayuntamiento en septiembre de 2007, es que estarán calificadas como viviendas de protección oficial por lo que no podrán venderlas en un plazo mínimo de 15 años.

La comisión de Urbanismo ya dio el visto bueno a la cesión de esta superficie la semana pasada y sólo quedaba que el Pleno lo aprobara la pasada semana para seguir adelante con esta operación, en la que se incluirán también otras 50 VPO que promoverá el Instituto Municipal de la Vivienda y otras 194 viviendas libres que harán los propietarios de la finca. Aunque tarde, los vecinos que aún siguen esperando el momento en el que puedan empezar sus nuevas casas están satisfechos con el acuerdo. "Al final todo ha salido bien", aseguró Franquelo, si bien también reconoció que la mayoría "están desesperados y llaman todos los días para saber cómo va la tramitación".

Y es que no es para menos. Los que prefirieron esperar a que el Ayuntamiento cediera la parcela han estado todo este tiempo viviendo en casas familiares o de alquiler y "ya empieza a no salirles las cuentas", según el presidente de la cooperativa. Para ir ahorrando tiempo, ya se han puesto en contacto con arquitectos y empresas constructoras que deberán ahora diseñar las viviendas y que podrán estar acabadas en un plazo máximo de 15 meses desde que dispongan de los terrenos de forma definitiva.