El Málaga Femenino se juega la permanencia en estas últimas dos jornadas del campeonato. Hoy se mide al Athletic de Bilbao en Lezama a partir de las 18:00 horas, y la última jornada será ante el Rayo Vallecano en casa. Dos rivales que ha demostrado durante todo el año que no bajan los brazos. Dos rivales a los que habría que derribar para asegurarse un año más en la máxima categoría de las féminas, la Liga Iberdrola.

Ahora mismo, las blanquiazules tienen la salvación en sus manos. Depende (casi) de sí mismas, ya que igualan con 21 puntos con los otros dos equipos implicados en el descenso, el Fundación Albacete y el Madrid CFF. Con el triple empate a 21, el Málaga tiene el golaveraje favorable, aunque en el individual lo tiene perdido ante los madrileñas (2-1 en casa y 1-0 fuera) y ganado con las albaceteñas (4-2 en casa y 1-1 fuera). Es por ello que las blanquiazules estarán también muy pendientes a todo lo que acontece esta jornada.

El empate in extremis ante el Sporting de Huelva fue una jarro de agua fría para las malagueñas, como reconoció Raquel antes de este partido: “El equipo estaba prácticamente salvado ganando al Sporting de Huelva y el empate nos supo agridulce, pero somos un equipo luchador y que lo lleva demostrando en todo este tiempo. Nos hemos rehecho y estamos mentalizadas de que tenemos un partido muy importante y las sensaciones están siendo positivas”.

Sobre el rival de hoy, el Athletic, la centrocampista comentó que han demostrado ser ”un club que sabe a lo que juega, que tiene potencial. Aquí hicieron un buen partido, pero la situación de ambos equipos ha cambiado mucho y jugándonos lo que nos estamos jugando creo que para ellas no será tan fácil”.

“El equipo lleva mucho tiempo en descenso y muchos nos daban por muertos. Somos un equipo que tenemos coraje, corazón y luchamos como las que más. Dependemos de nosotras mismas y estoy segura de que lo vamos a sacar”, zanjaba Raquel.