Málaga y Osasuna afrontan un partido trascendental y con asuntos pendientes. Intentan quitar hierro sus entrenadores, hablan de lo que resta, pero tampoco niegan lo evidente. "De ganar este partido damos un paso de gigante y de rebote dejaríamos a un rival un poco tocado", decía Jagoba Arrasate, técnico rojillo, que señaló los puntos fuertes de su rival.

"Defiende muy bien y es muy solidario. Y normalmente los partidos los lleva a su terreno y es difícil que nos encontremos cómodos. Tenemos que hacer nuestro juego, algo que normalmente no hacen los que juegan contra ellos. Son ganadores de duelos y es un equipo que corre mucho, es el que más distancias hace en la Liga. Es súper generoso en el esfuerzo y a balón parado es uno de los mejores. En algunas facetas del juego nos va a exigir el máximo", comentaba Arrasate, que añade: "Entre sus virtudes está el minimizar al rival y no dejarle jugar.Tendremos que estar mejor que en los últimos partidos para tener opciones de ganar allí".

También se mojó el técnico sobre la falta de gol blanquiazul: "Es verdad que los últimos resultados están siendo muy cortos. No encajan, pero les está costando marcar. Ojalá el lunes podamos defender bien y que ellos no estén acertados de cara a puerta. Pero estas cosas van por rachas. Es un equipo que desde el juego directo genera muchas ocasiones de gol. Juegan mucho al centro-remate. A nivel defensivo hacen partidos muy incómdos a los rivales".

Y sobre La Rosaleda, espera "un gran ambiente": "De inicio el público estará con el equipo. Es un rival que cuando no está bien te empata y cuando lo está te gana. No sé lo que pensarán allí, pero está con todas las opciones del mundo para ascender. Habrá ambiente de partido importante que gusta jugar a todo el mundo".