El Málaga se pone serio. Ha dado un paso adelante y ha empezado a dar forma a la verdadera plantilla, la que tiene que competir por el ascenso a Primera División. Sobre todo esta semana, donde trae los refuerzos a pares. Y todavía quedan operaciones por cerrarse, fichajes por llegar, futbolistas por salir. En el momento en que se hagan oficiales las incorporaciones tanto de Alfred N'Diaye como de Gustavo Blanco Leschuk, serán ocho los futbolistas llegados para esta temporada 2018/19 que está muy cerca de comenzar.

La cosa no se quedará ahí. Caminero dejó claro ayer que el Málaga estará hasta el día 31 de agosto atento al mercado, que si puede venir alguien de última hora que cuadre, se firmará. Pero pasa eso todavía faltan días, muchos días. Antes de llegar a la hora límite, el club blanquiazul hará más fichajes. Tienen que llegar un portero, un central, un lateral derecho, puede que un centrocampista, un extremo y otro delantero (como poco). Luego habrá que ver si se consigue o no.

Está el hándicap, tampoco se puede olvidar, de que para dar entrada a algunos futbolistas, se tienen que producir salidas. Y prácticamente nadie está dando facilidades para ello. Aun así, a medida que se acerque el 31 de agosto, se irán despejando incógnitas.

Volviendo al capítulo de los fichajes, el Málaga anunciará dos nuevos refuerzos durante el día de hoy. Uno de ellos es N'Diaye. El centrocampista franco-senegalés llegó a la Costa del Sol la noche del lunes, casi martes ya. Durante la mañana de ayer pasó el reconocimiento médico. En Martiricos esperaban poder confirmar su cesión (por parte del Villarreal) en las horas siguientes. Hubo cambio de planes por algún problema de papeleo, según informó el propio Málaga, al que no se le da mayor importancia.

Paralelamente, poco después de presentar en sociedad a Haksabanovic, José Luis Pérez Caminero y Juan Rodríguez se marcharon al aeropuerto de Málaga para recoger a Gustavo Blanco Leschuk. El delantero argentino llegó al mediodía para ultimar su incorporación al equipo malacitano. A primera hora de la tarde estuvo en una clínica de Torremolinos pasando parte de su reconocimiento médico.

El punta llegará cedido por el Shakhtar Donestk (Mendoza, Argentina, 5-11-1991) y en su caso parece que sí habrá una cláusula de compra por parte del Málaga. La operación no ha resultado sencilla puesto que este corpulento ariete (mide 1.90) tenía otras ofertas encima de la mesa, como la del Sporting de Gijón. Por sus características, encaja perfectamente en los esquemas de Muñiz.

Así están las cosas en el Málaga, que lleva una semana de tal volumen de operaciones que ha sorprendido a propios y a extraños, después de un mes sin apenas novedades. Además, estos aires están empezando a calar en la afición.