La Junta de Andalucía ha asegurado este viernes que, tras la inspección de los técnicos en la residencia de ancianos Seniors de Benalmádena (Málaga), donde se detectaron seis casos de sarna, el centro "ha superado todos los controles sin detectarse anomalías ni incidencias".

La Delegación de Igualdad, Salud y Políticas Sociales en Málaga ha informado en un comunicado de que, una vez se ha activado el protocolo de seguimiento, se ha constatado que la residencia cumple con los criterios para la atención de usuarios.

Concluida la inspección, la Delegación ha afirmado que la atención de este centro se encuentra dentro de la normalidad, por lo que sus responsables recibirán en los próximos días un informe con los resultados del mismo.

Sin embargo, dicha Delegación seguirá "realizando las labores de inspección necesarias para asegurar que se siguen cumpliendo los requisitos exigidos para el buen funcionamiento de cualquier residencia para personas mayores", añade el comunicado.

Por su parte, la residencia de ancianos ha asegurado esta mañana que actuó "de forma diligente y con total transparencia y coordinación con las autoridades sanitarias" tras detectarse el brote hace dos semanas.

En un comunicado, la dirección del centro ha señalado que "todo el protocolo de actuación para estos casos se cumplió detalladamente" y que el personal del centro colaboró "de forma profesional y ejemplar".

Ha incidido en que, tal y como trasladó ayer la Junta de Andalucía, "el brote se controló y no es susceptible de sanción", y recuerda que la sarna es una enfermedad frecuente en colectividades.

La enfermedad se transmite por un primer caso de una persona que porta el parásito, que "en este caso vino del exterior, y que luego ocupó plaza de concierto", ha especificado Seniors, que ha agregado que el personal de la residencia detectó la dermatitis "pronto" y la dirección del centro informó al distrito sanitario.

Ha insistido en que las condiciones higiénicas del centro y residentes son "óptimas en todo momento", como se constata en las "múltiples inspecciones" que se realizan al año, y que no ha existido riesgo para la vida de los mayores ni falta de higiene.

Ha subrayado que, gracias a la profesionalidad y cualificación de la plantilla de la residencia, "los casos han sido limitados" entre las 175 personas que conviven en el centro, entre residentes y trabajadores.

La empresa ha mostrado su "total disposición y colaboración" con las distintas administraciones para "facilitar cuantas inspecciones consideren necesarias", y ha recordado que desde 1999 "ha pasado satisfactoriamente todas a las que se ha sometido" y nunca ha tenido sanción alguna.